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DAMASCO, Siria (EFE).- Rodeados y bajo el fuego de las fuerzas kurdas y de la coalición internacional capitaneada por Estados Unidos, centenares de yihadistas se rindieron hoy en la localidad de Al Baguz, el último reducto aún en manos del grupo terrorista Estado Islámico (EI) en el este de Siria.
Centenares de combatientes se entregaron a la alianza de milicias liderada por kurdos Fuerzas de Siria Democrática (FSD), que hace tres días comenzó la ofensiva contra el último enclave de los radicales, ubicado en la provincia de Deir al Zur.
Un comandante de las FSD, Diyuar Idlib, aseguró a Efe que 250 miembros del EI en su mayoría iraquíes se entregaron hoy en las afueras de Al Baguz, mientras que el Observatorio Sirio de Derechos Humanos situó en 300 los combatientes sirios y de otras nacionalidades que se rindieron este lunes.
El Observatorio, que tiene sede en el Reino Unido pero cuenta con una amplia red de colaboradores sobre el terreno, destacó que esos combatientes forman parte de los últimos miembros del EI que resisten escondidos en "túneles y trincheras" en los campos de cultivo de Al Baguz, tras haber perdido el control de la propia localidad.
Idlib destacó que "la salida de un gran número de combatientes evidencia que no van a poder resistir y quizás se entreguen en breve", después de varias semanas de cerco por parte de las FSD y sin que hayan podido recibir suministros.
Las FSD dijeron a través de su cuenta de Twitter que cerca de 200 yihadistas de procedencia asiática o turcos se entregaron hoy después de días de enfrentamientos con las milicias.
Asimismo, distribuyeron un vídeo en el que se puede ver a hombres, algunos de ellos con muletas o con dificultades para caminar y vestido con andrajos, agrupados en un campo y siguiendo las órdenes de un efectivo de las FSD.
Además de los yihadistas, hoy abandonaron Al Baguz cientos de civiles, que se suman a los miles que lo han ido haciendo en las pasadas dos semanas de forma escalonada y que han sido de facto detenidos por las FSD.
Según Idlib, unos 1.250 civiles, en su mayoría mujeres y niños, pudieron marcharse hoy, mientras que el Observatorio cifró en unos 1.300 los no combatientes que salieron del último reducto del EI y llegaron a zonas bajo el control de las FSD.
El comandante detalló que estas personas llegaron a las posiciones de las FSD en Al Baguz Tahtani, parte sureña de la localidad, y han sido trasladados en camiones hacia un punto ubicado a unos 20 kilómetros al norte de la población, donde son registrados y separados bajo la supervisión de la coalición internacional.
Habitualmente, los niños y mujeres son llevados al campamento de desplazados de Al Hol, ubicado a unos 300 kilómetros al norte de Al Baguz, mientras que los hombres van a centros de detención de las FSD para ser interrogados e investigados para establecer si son miembros del EI.
Entre ellos hay hombres y mujeres de varias nacionalidades, incluidos europeos, y muchos son iraquíes, que llegaron a Siria después de que el EI fuera expulsado y perdiera todos sus dominios en Irak a finales de 2017.
Las FSD han arrebatado al grupo radical muchos de los territorios que llegó a dominar en el norte y el este de Siria, incluida su "capital", Al Raqa, hasta arrinconar a los extremistas en la orilla este del río Éufrates, por la que las milicias han ido avanzando en los pasados meses hasta reducir el autoproclamado "califato" del EI a unos terrenos agrícolas.
Al Baguz es el último territorio habitado que escapa al control de las milicias y hacerse con él es una cuestión más simbólica que estratégica, aunque la ofensiva sobre la localidad se está prolongando más de lo esperado.
El pasado viernes las FSD lanzaron el asalto final para conquistar este enclave, después de haber permitido la salida de los civiles en las dos semanas anteriores, pero las milicias desconocen cuántas personas quedan en su interior y cuántos combatientes habrían decidido permanecer y luchar hasta el final.
