Informe de 100 días de Clara Brugada en el Auditorio Nacional

Aunque no alcanzaron boleto para presenciar el informe de 100 días de la jefa de Gobierno, Clara Brugada, en el Auditorio Nacional, cientos de simpatizantes acudieron a las afueras del centro de espectáculos para presenciar el evento a través de las dos megapantallas instaladas en el exterior.

"Es un honor estar con la compañera Clara Brugada hoy en su día tan importante. Con ella se han sentido mejor las cosas, es muy linda y da mucho apoyo a las mujeres", dijo Elba González, quien desde las 9:00 horas se dio cita afuera del Auditorio Nacional este domingo.

Así como Elba, cientos de personas, bajo el sol, animaron a la jefa de Gobierno antes, durante y después de su informe, que para los asistentes "es un sello de las cosas que ha hecho bien y de que sí cumple sus programas y da los apoyos".

La jefa de Gobierno, Clara Brugada, rindió este domingo su primer informe como mandataria capitalina, en torno a sus primeros 100 días de administración. El evento fue en el Auditorio Nacional e inició alrededor de las 11:00 horas.

Dos horas antes de que iniciara el informe, el ambiente en el exterior del recinto era de fiesta, la cual era animada por al menos 10 bailarines en zancos, que saltaban y bailaban en una de las escaleras que da al Auditorio Nacional.

Con llamativos trajes verdes, rojos y azules, y con distintos sombreros, los animadores saludaban a los contingentes que desde temprano se dieron cita, y pese al calor que azotaba la capital, no dejaban de alentar.

Cada uno de los contingentes contaba con un encargado de tocar los tambores y, cada 10 minutos iniciaban a alentar con "¡Es un honor, estar con Clara hoy!"; hasta que se unían más grupos y las porras se escuchaban hasta la entrada del Auditorio.

"(Brugada) ha sido muy buena con nosotros y aunque ya no alcanzamos boletos, aquí venimos a apoyarla y a gritarle, aunque sea desde acá afuera", dijo Ernestina Gómez, quien llegó desde las 9:30 horas para alcanzar lugar frente a una de las pantallas gigantes, donde se transmitió el informe.

Al término de las escaleras que dan al Auditorio Nacional, un grupo de danzantes bailaba en círculo por donde era el paso de los funcionarios y alcaldes al recinto. Ahí, decenas de personas se congregaron para disfrutar del espectáculo.

Alrededor de las 11:00 horas, cuando se anunció en las megapantallas el inicio del informe, adultos mayores, jóvenes, simpatizantes de Morena y mujeres vestidas con trajes indígenas guardaron silencio y dejaron de tocar para escuchar el himno nacional mexicano.

Con las primeras palabras de la jefa de Gobierno, las porras de "¡Es un honor estar con Clara hoy!" se intensificaron, y entre aplausos y más gritos los asistentes tomaron sus asientos, que iban desde las escaleras, una barda, un banco o el piso de la calle.

Las personas escuchaban el informe acompañado de papas, nieves, chapulines, y chetos, que iban desde los 20 hasta los 50 pesos. En otros casos, las personas abrieron sus recipientes de comida y, con tostadas, crema y refresco se sirvieron tinga y picadillo.

Entre el público, que escuchaba atentamente cada punto que, apoyada de su texto, Brugada mencionaba, se encontraba una mujer de unos 67 años quien, aún bajo el sol, no volteaba la mirada a otro lado que no fuera la pantalla.

Así, con toda su atención puesta en el informe, Ángeles Francisco reaccionaba a cada uno de los programas a los que la jefa de Gobierno aludía, desde temas de vivienda, trabajo, agua y seguridad, hasta las pensiones.