¡Bendita ley de adquisiciones!
Las versiones que vinculan en materia de negocios al presunto autor intelectual del homicidio del expresidente de la Coparmex local Julio César Galindo, con la candidata de Morena a la gubernatura, Mónica Liliana Rangel Martínez, no son ni descabelladas ni infundadas. Durante los cinco años que la doctora estuvo al frente de los Servicios de Salud del Estado, el químico fármacobiólogo Raúl Trejo Sánchez recibió contratos -mediante adjudicación directa- por aproximadamente 300 millones de pesos.
Tengo a la vista el acta oficial de la sesión extraordinaria del Comité de Adquisiciones de los SSSLP celebrada el 31 de octubre de 2017, en la que se revisan las adquisiciones de bienes y servicios realizadas durante el segundo (abril-junio) y tercer trimestre (agosto-septiembre) de ese año. Ahí se da cuenta de que con fecha 20 de junio se adjudicó directamente -sin licitación alguna- un contrato por 57 millones 958 mil 128 pesos a la persona física Patricia Treviño Delgado, esposa de Trejo Sánchez, para el suministro de “Productos químicos básicos/materiales, accesorios y suministros de laboratorio”. Esa fue la adquisición más costosa efectuada en los seis meses revisados. La siguiente en monto fue inferior a 15 millones de pesos.
Para poder adjudicar un contrato de valor tan elevado, el Comité de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios de los Servicios de Salud de San Luis Potosí invocó el artículo 26, fracción VI de la Ley de Adquisiciones del Estado, que dispone lo siguiente: “El comité podrá, bajo su responsabilidad, adjudicar directamente adquisiciones, arrendamientos y servicios, sin sujetarse a las formalidades de los procedimientos de licitación pública e invitación restringida, cuando: …VI existan razones justificadas para la adquisición y arrendamiento de bienes o servicios de marca determinada”. De acuerdo con expertos consultados por esta columna, en ese rubro abundan los proveedores de distintas marcas que gozan de prestigio en el mercado, los cuales puestos a competir en una licitación nacional habrían podido ofrecer mejores precios. Además, en 2017 no existía escasez de ningún insumo de esa naturaleza.
De ser un proveedor que en el sexenio anterior obtuvo sin privilegios contratos por algunos cientos de miles de pesos, Trejo Sánchez vio cambiar radicalmente su “suerte” en 2015, cuando la Dra. Rangel Martínez llegó a la titularidad de los Servicios de Salud y designó al también químico farmacobiólogo Antonio Bautista Montelongo -compadre de Trejo Sánchez- como Coordinador de Laboratorios Estatales.
Sobre este tema de las “peculiaridades” aplicadas por los Servicios de Salud para sus compras y/o arrendamientos de bienes y servicios durante la gestión de la ahora candidata morenista, volveremos en fecha próxima, pues queda mucha tela de dónde cortar.
Por cuanto hace a la noticia de última hora, en el sentido de que la Unidad de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral plantea cancelarle su registro de candidata a la Dra. Rangel Martínez por no haber presentado su informe de ingresos y gastos en la precampaña, yo la tomaría con cierta cautela, porque la resolución corresponde al Consejo General del INE que no se ha pronunciado al respecto, y luego debe ser convalidada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Y aunque ya sentaron dos precedentes imposibles de ignorar con los casos de Guerrero y Michoacán, me quedo con la impresión de que sería mucho estirar la liga. ¿Tumbarle una tercera candidatura a Morena y ninguna a otro partido o coalición?
COMPRIMIDOS
Una vez conocida la identidad y el perfil del presunto autor intelectual del homicidio de Julio César Galindo, se corrobora la precisión hecha uno o dos días después del crimen por la Fiscalía General del Estado, en el sentido de que el móvil tenía que ver con el entorno empresarial propio de la víctima y no con cuestiones políticas o vinculadas con sus actividades como dirigente de organismos de la iniciativa privada. En efecto, Galindo y Trejo eran amigos desde hace muchos años, al parecer incluso compadres. Fueron socios en una agencia automotriz de Ciudad Valles y compartían, con varios inversionistas más, la propiedad del sanatorio privado Mediscin. La tragedia se desencadenó por desacuerdos de negocios y dineros. Todo indica que JCG no tenía ninguna participación en los ramos de laboratorios y proveeduría gubernamental.
Las pretensiones de ultrachilango Héctor Serrano Cortés de hacerse pasar como potosino por vecindad con residencia de tres años para ser diputado local plurinominal fueron arrojadas ayer al cesto de la basura por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, última instancia en la materia. El desechamiento de la demanda por notoriamente improcedente hizo que sus 198 cuartillas preparadas a un costo millonario en uno de los despachos jurídicos más fifís de la Ciudad de México valieran lo mismo que un chicle masticado. Esta es una historia que amerita ser contada con mayor extensión, pues al final del dia es resultado de una singular mezcla de arrogancia, cretinez y pendejismo. Pero a lo bestia. La impugnación final contra la candidatura de Nava puede resolverse en cualquier momento.
Ayer miércoles, a través de las páginas de Pulso, el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto Castillo, nos salió con una noticia buena y una mala. La primera, al reiterar que la dependencia a su cargo tiene identificado e investiga a un grupo delictivo involucrado en el proceso electoral potosino, al que incluso ya se le habrían congelado cuentas bancarias, en coordinación con la Comisión de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral. La mala, que por instrucciones del presidente López Obrador no debe emprender acciones punitivas antes de las elecciones, para que no se diga que la UIF está siendo utilizada con propósitos políticos, pero que pasando los comicios ese tipo de asuntos retomarán su paso. Ojalá sea cierto.
Por cierto, el caso Dothé es muy extraño. Pidió licencia por tiempo indefinido a su senaduría y renunció a su militancia en Morena. Como nadie ha dicho nada en contrario, es de entenderse que el escaño vacante será ocupado por su suplente y amigo Eli Cervantes, de quien tampoco se sabe que haya renunciado a Morena. Es decir, si esto es así, el daño partidista es más bien simbólico, pues mantiene la posición legislativa y únicamente pierde un militante. Lo que causa mayor extrañeza es que en el entorno tanto de Primo como de Eli se sabe desde el 2018 que entre ellos se hizo un pacto de caballeros para ir al senado los dos, tres años cada uno. Oficialmente el primer trienio se completa en agosto próximo, pero como ya no hay sesiones y ninguno de los dos iba a formar parte de la Comisión Permanente, lo mismo da que ya se haya anunciado el relevo. Falta que se le tome protesta a Cervantes. Así de botepronto, pareciera que decidido a honrar su compromiso personal con su suplente, Primo decidió irse envuelto en la bandera del purismo partidista y el abandono de privilegios. De lo que si no hay duda es de que le va a dar buena lata a la doctora.
Y si de extrañezas se trata, lo mismo sucede con la denuncia de Ricardo Gallardo Cardona y su señora esposa, por la supuesta agresión de que habría sido víctima esta ultima el pasado fin de semana. Luego de un par de tuits excesivamente vagos (“Le sucedió algo inesperado a mi esposa”, “Fui amenazada de muerte mientras transitaba por la capital del estado”), se presentó una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado, pero no ha sido posible saber por lo menos lo esencial de su contenido. No se trata de curiosidad malsana. Lo que sucede es que hay una diferencia abismal entre que la dama haya sido encañonada y amenazada por un sujeto para que le entregara su bolsa o su reloj, o si lo hizo para enviarle un mensaje político a su marido. Y por si motivos de extrañamiento no faltaran, se informa luego que desde hace años la señora dispone de una escolta formada por elementos de la Policía Municipal de Soledad. ¿Entonces?
Mucha tinta ha corrido ya a propósito de las entrevistas que Carlos Loret de Mola vino a realizar entre los principales candidatos(as) a la gubernatura potosina. Entiendo que se invitó a tres: Mónica Liliana Rangel, Octavio Pedroza y Ricardo Gallardo, pero este ultimo declinó; es decir, no fue. Yo me quedo con dos datos que capturaron mi atención: Octavio se vio más echado para delante de lo que es habitual en él; se mostró menos evasivo y más claridoso, aunque fiel a su naturaleza flaqueó un tanto cuanto ante lo que parecía una confrontación abierta incitada por el entrevistador. En su turno, la doctora se mostró preparada; llevaba respuestas claras y breves para algunas de las interrogantes más difíciles, pero también decidió ser fiel a su naturaleza y a punto de despedirse con buen saldo, decidió hacerlo ¡mintiendo! “¿Usted fue priista?” preguntó Loret. “Apoyé, trabajé, con gobiernos priistas y obviamente que participé en algunos eventos priistas. Nunca fui afiliada”, respondió. Caray, fue hasta cuadro distinguido del PRI, condición que se adquiere al ser elegido(a) consejero(a) política. Ya se publicaron los documentos respectivos. Hay malos hábitos insuperables.
Si lo de los fármacos antidepresivos que aparecen en la selfie del Tecmol no es un vil montaje, eso explicaría muchas cosas. Para empezar, el comportamiento cual Guasón, haga usted de cuenta, del individuo éste. Claro que ese tipo de efecto solo puede producirlo un exceso en las dosis. Es decir, este engendro de los sótanos de la política potosina se pasa de rosca y en lugar de deprimirse se exalta a niveles estratosféricos.
A finales de los años setenta, la revista española Cambio16 envió cartas a medio centenar de escritores, intelectuales, académicos y figuras públicas pidiéndoles indicaran cual era a su juicio la palabra más bella del idioma español. Yo recuerdo la propuesta de Jorge Luis Borges –“Penumbra”- porque es la que más me gustó. Otro autor latinoamericano, no estoy seguro si fue Carlos Fuentes, propuso “Cristal” y no faltó algún romántico, cuyo nombre no me viene a la mente, que opinó que era “Corazón”. Hacía poco que había muerto el generalísimo y el más exaltado y fundamentalista de sus herederos ideológicos era Blas Piñar, a quien también alcanzó la solicitud. Respondió con tres opciones: “Dios”, “Patria” y “Franco”. Recordé la historia ahora que se hizo público que la vacuna anti-covid mexicana, que en realidad no es mexicana, a propuesta de ya saben quién llevara el nombre de “Patria”.
Hasta el próximo jueves.