Delito y Drogas
Los programas penitenciarios para el control
de adicciones han sido diseñados pensando
en los hombres, y eso es discriminación.
Catalina Pérez
En esta mi primera columna de este año, quisiera centrar la atención en una problemática, hasta cierto punto invisibilizada, sobre la posible relación existente entre el consumo de drogas por mujeres y la comisión del delito en San Luis Potosí. Se trata de una investigación que coordino a lado de Ulindey Ruíz, a quien agradezco el apoyo en esta colaboración.
Actualmente el consumo de drogas ha sido notablemente incrementado, esto debido a la gran cantidad de estupefacientes que se han puesto en el tráfico de drogas y en cual muchas personas (incluidos menores de edad y mujeres) tienen un fácil y rápido acceso a esas sustancias.
Desde el año 2016 a 2017 el gobierno federal no ha vuelto a retomar y publicar la aplicación de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (ENCODAT). Sin tener una prevalencia certera del consumo de sustancias psicoactivas en nuestro país y estado es imposible concientizar a nuestra sociedad y poder darle una mejora a dicha problemática.
Desde hace algunos años ha incrementado el rol de la mujer en nuestra sociedad, haciendo validar nuestros derechos que por muchos años estuvieron opacados por los del género masculino. Hoy en día la mujer puede realizar cualquier tipo de actividad que anteriormente solo podían hacer los hombres.
Cuando es una actividad legal, honesta y de gran interés social o familiar se aplaude y se menciona con orgullo, pero ¿qué pasa cuando la mujer actúa en contra de la ley y en contra de los principios honestos y legales que social y jurídicamente tenemos?
Es ahí cuando una conducta desviada socialmente es cuestionada y juzgada sin conocer los antecedentes que tiene esa mujer para llevar a cabo dichas conductas. Aquellas personas que tienen alguna adicción a sustancias psicoactivas y que se encuentran privadas de la libertad tienen derecho o incluso es puesto como condición de su sentencia a recibir un tratamiento de abstinencia para poder tener una mejora o inclusive una eliminación de su adicción.
Hablando desde una perspectiva social, se deduce que el ser consumidor de alguna sustancia ilícita es indicador de tener conductas criminales. Es por eso, que la investigación que se está llevando a cabo busca encontrar si existe o no dicha relación entre ambos sucesos, y que tan cierto o falso es que las conductas criminales se realizan bajo la influencia de alguna droga.
Las y los espero con el gusto de siempre el próximo viernes.
carloshernandezyabogados@gmail.com
