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Desiertos y semidesiertos. Ecología de los mismos

Por Adolfo González Díaz Infante

Mayo 21, 2022 03:00 a.m.

En la actualidad los desiertos se clasifican en tres diferentes tipos: 

1.- EXTREMADAMENTE ÁRIDOS: Son superficies que llegan a tener 12 meses y más sin precipitación pluvial. 

2.- DESIERTOS ÁRIDOS: Son superficies que reciben menos de 250 mm de lluvia por año.

3.- DESIERTOS SEMIÁRIDOS: Son superficies que reciben entre 250 y 500 mm de agua por año. 

Dentro de las clasificaciones y entrando más en detalle se deben de tomar en cuanta otras variables como son las temperaturas máximas y mínimas que también los pueden dividir en desiertos calientes y desiertos fríos. Un ejemplo de desiertos fríos sería la denominada TUNDRA que existe en Rusia, China, Mongolia y Canadá principalmente; la disponibilidad de otras fuentes de agua como pueden ser ríos que los atraviesen con agua producto de precipitaciones en puntos externos al mismo; la evaporación, es decir el agua que potencialmente puede evaporarse en su superficie y que influye en la flora y fauna que lo habitan.

En cuanto a su situación geográfica, los desiertos que se ubican entre las latitudes 30 grados y 50 grados Norte o Sur se denominan desiertos subtropicales y un ejemplo en México sería el desierto de SONORA que se extiende desde Noroeste de México hasta el Suroeste de EU. Y los que se encuentran entre las latitudes 30 grados norte y 30 grados sur se denominan Desiertos Tropicales por su cercanía a los trópicos tanto de Cáncer en el hemisferio Norte como de Capricornio en el hemisferio Sur. En nuestro caso, el desierto que ocupa parte de los estados de San Luis Potosí, Coahuila, Nuevo León, Zacatecas y Querétaro estaría en esta clasificación geográfica y además sería un semidesierto, ya que nuestra precipitación promedio anual es de entre 300 y 400 mm.

Por lo anterior, los habitantes de buena parte de estos estados debemos concientizarnos que vivimos en una ZONA DESÉRTICA y por lo tanto somos HABITANTES DESÉRTICOS y adecuarnos a nuestra realidad ambiental, especialmente en lo referente al consumo de agua, que es la principal variante que define un desierto.

En cuanto a los consumos de agua a nivel mundial, del 100 % del agua que consume una ciudad con cierto grado de INDUSTRIALIZACIÓN, como es nuestro caso, el 80 % lo consume la industria y sólo el 20 % lo consume la población de la ciudad. Por lo anterior, el primer objetivo debe ser que la industria haga un uso adecuado de la misma, es decir emplear la menor cantidad de agua en sus procesos y reciclar el mayor volumen posible desechando el menor volumen posible, en este caso el beneficio es cuatro veces mayor que la eficientación del uso en la población general.

Por parte de la población y que somos los primeros afectados al iniciar las épocas de escasez de agua, como sucede en primavera hasta que se inicia la época de lluvias en los meses de junio, julio, agosto y septiembre, tenemos la obligación de eficientizar nuestro uso de agua por medio de pequeños cambios en nuestros hábitos de consumo que a continuación enumeramos:

1.- Los jardines suelen ser el mayor consumo de agua en una casa y en muchos de los casos lo que menos usamos; de ser posible debemos transformar la mayor superficie en JARDINES DESÉRTICOS que son realmente bellos y no consumen agua por estar conformados de plantas desérticas como magueyes, nopales, suculentas, palmas, etc.

2.- Nuestro baño diario, el cual puedes controlar de varias maneras: la duración del mismo y la más importante y fácil es el volumen de agua a utilizar, abre la mitad de la caliente y utilizarás la mitad de la fría con el mismo resultado final. Regula tu calentador para no calentar el agua al máximo para después enfriarla con más agua fría. Es una incongruencia energética total “CALENTAR PARA ENFRIAR”.

3.- El WC: Antes los W.C. tiraban 20 litros por descarga los actuales consumen solo 6 litros promedio por descarga, además no es necesario, sobre todo en las noches, soltar cada vez que vas al baño, haciéndolo una sola vez al ser necesario o hasta en la mañana.

4.- Limpieza de ropa y trastes de comida. En este caso no es necesario abrir toda la llave, normalmente con la mitad del volumen tienes el mismo resultado, especialmente tener cuidado si en la casa tienes equipo hidroneumático que aumenta mucho tu gasto, se puede regular y bajar la presión de el mismo.

Recordemos que el “AGUA MÁS CARA ES LA QUE NO EXISTE”.