La Fenapo en números
Los últimos datos reales que se tienen de la Feria Nacional Potosina (Fenapo) corresponden a 2019, de ellos sabemos que los ingresos por acceso a las instalaciones y uso de estacionamiento, ingresaron $40’000,000.00 (cuarenta millones de pesos). Estos ingresos, manejados por el patronato organizador de la Feria, permitían pagar a los artistas contratados, es decir, no sólo por el evento, sino además proporcionarle viáticos, traslados, hospedaje, seguridad, y cualquier requerimiento adicional personal o técnico que libremente determinara la empresa representante.
La populista determinación de volver gratuito el acceso a la FENAPO ocasionó que termináramos pagando mucho más. No es necesario hacer ver que a toda fiesta, le llega su resaca y el pago de sus facturas; nadie hace nada gratis, ni los artistas que desfilan en la galería de fotografías del gran promotor de espectáculos que tenemos como gobernador.
Esto también tiene otra razón de ser: si no se lleva boletaje no se controla la asistencia, esto permite que impere la corrupción; no hay un contra qué comparar o contra qué empatar; nada se puede contraponer contra algún dato cierto. Si no se cobra la entrada, no hay forma de empatar las entradas contra la asistencia para desmentir; así es posible afirmar que entraron 500 mil personas y no habrá un boletaje que lo contradiga. Electoralmente es muy redituable no cobrar, sobre todo en la capital, ciudad que no gobierna, y estimular la asistencia en gran masa de los habitantes de Soledad.
Sin embargo, por mucho el gobernador comparta gustos musicales con los artistas invitados, ni la Banda MS dejó de cobrar casi seis millones de pesos, ni los Kumbia Kings rechazaron facturar casi tres millones de pesos, mucho menos La Arrolladora Banda Limón trabajó gratuitamente, lo hizo por al menos dos y medio millones de pesos; tampoco el amigo Gerardo Ortiz, que tanto quiere al pueblo potosino, dejó de cobrar de nuestros impuestos, un poco menos de tres millones de pesos.
Entre Cristian Castro, Panteón Rococó, Alejandra Guzmán, Dany Ocean y Emmanuel, cobraron poco más de 20 millones de pesos, mientras que “nuestros grandes amigos”, J. Balvin y Nicky Jam, se llevaron respectivamente de nuestros impuestos 650 mil dólares y 250 mil dólares, o sean 19 millones al tipo de cambio (21.50) de ese momento. Hay que considerar, también, los más que generosos viáticos que se les pagaron a cada uno de ellos.
Según dos especialistas consultados, las empresas promotoras contratadas para el teatro del pueblo en la feria gallardista 2022, facturaron poco más de 100 millones de pesos, más las comisiones para quien fuera representante o promotor. No estaría por demás preguntarles a las empresas beneficiadas: Asesoría Conserint S. C., Palapa Music S. R. L. de C.V., Producciones Equs S. A. de C. V., Publicidad y eventos 19 S. A. de C.V., si harían el favor de decirnos cuanto (en realidad) cobraron en total, ya que en el gobierno no se dignan a transparentar esos contratos (por algo será). Hermetismo total y un contralor general que ordenó la suspensión de la auditoria 2022, bajo el pretexto que sería realizada por un despacho externo, pero en realidad fue obedeciendo órdenes superiores. Obviamente se apuesta al olvido y que no se auditará; se pide transparencia a gritos sólo cuando se trata de los recursos del Interapas. Se vé la paja en el ojo ajeno, pero no la viga en el propio.
No lo olvidemos: nada es gratis, ni las enchiladas, ni los conciertos, ni los camiones, ni los espectáculos todo se carga a nuestro impuestos mientras se busca beneficiar a un círculo rojo y a grupo de promotores elegidos selectamente. Pero hay una justificante: a mayores problemas en el estado, más distracción es necesaria.
Mientras San Luis Potosí enfrenta una inseguridad no vista antes y la violencia encuentra un mejor ambiente para asentar sus reales seguimos aplaudiendo por los espectáculos gratis. Y todavía falta la Arena de la ignominia en la que no sabemos que barbaridades tendrán lugar. Lo peor o lo mejor de todo es que la fiesta aún no termina.
Juan José Rodríguez, querido amigo, felicidades por esos primeros 75.