Más nombres…

Continúo hoy con los listados de mexicanos que han jugado papeles significativos estos años de demagogia populista frente a una débil oposición formal, casi imperceptible. Veamos algunos casos muy diversos que complementan los presentados en este mismo espacio la semana pasada.

En los distintos medios, por ejemplo, resaltan ciertos comunicadores que se han entregado al oficialismo: Álvaro Delgado, Sabina Berman, Alejandro Páez o Lorenzo Meyer. A su vez, entre los que mantienen una posición crítica e independiente, están Pablo Hiriart, Raymundo Riva Palacio, Guillermo Sheridan, Enrique Krauze, Ramón Alberto Garza, Denise Dresser, Jesús Silva Herzog Márquez, Salvador García Soto, Martín Moreno, Ricardo Alemán, Azucena Uresti, Federico Berrueto, Sergio Sarmiento, Adela Micha y Anabel Fernández. Hay otros que por alguna razón tienden a apoyar al régimen, pero con posiciones más elegantes o menos desequilibradas: Julio Hernández, Jorge Zepeda Patterson, Denise Maerker o René Delgado.

Por sus argumentos críticos ante el régimen en las redes sociales, destacan además Macario Schettino, Fernando Belaunzarán, Marietto Ponce, Marco Levario Turcott y muchos otros. A favor del gobierno, llaman la atención Vicente Serrano, Damián Alcázar, Patricia Armendáriz… todos éstos vinculados de alguna forma al oficialismo.

Entre tantas mujeres valientes he mencionado varias, y está también Ceci Flores, la líder de madres buscadoras, como hay otras muy cuestionadas: Andrea Chávez.

Bueno, en mi columna anterior, incluía 65 nombres referidos a 1) los responsables directos de lo que ha sucedido los últimos diez años, 2) los integrantes de la familia presidencial, 3) los expresidentes que más se revalorizan ante el desastre actual, 4) los peores funcionarios de los últimos tres gabinetes presidenciales, 5) las mujeres más objetadas o las más valientes estos años, 6) otros hombres muy objetados o algunos muy valiosos, 7) exgobernadores que resaltan por sus omisiones o excesos, y 8) empresarios que han avalado graves fallas del gobierno Federal.

Hoy no he repetido ningún nombre, pero en adición a los 32 que agrego arriba vuelvo a incluir a cinco en una pequeña encuesta: De Gerardo Fernández Noroña, Ricardo Monreal, Adán Augusto López, Epigmenio Ibarra y Alito Moreno, ¿quién le parece a usted el más detestable (por ruin, mentiroso, corrupto, cobarde, incongruente y grosero)? Hay muchos más, claro, pero ¿de éstos el orden en que aparecen representaría más o menos el grado en que resultan repugnantes? Y surgen otros candidatos como Manuel Velasco, Jesús Ramírez Cuevas, Mario Delgado o Hugo López Gatell.

Más que por sus notorios defectos personales, estos individuos se consideran aquí como muestra de la degradación de la política mexicana y, en especial, del gobierno morenista y la debilitada oposición.

¿Qué tan parciales son estos listados? No hay un sesgo ideológico, créanme. Aunque me reitero en contra de los engaños y los claros resultados de los pésimos gobiernos que sufre México.

* LA PRESIDENTA DE MÉXICO se ganó severas críticas por la frialdad con la que minimizó las revelaciones de campos de exterminio del narcotráfico y porque, al resurgir el amplio reclamo en contra del llamado NarcoPresidenteAMLO, se atreve a pedir “déjenlo en paz”, como si no tuviera por qué rendir cuentas… ni siquiera declarar por tantos crímenes y extravíos en su sexenio.

Mal apoyada, CSP ha tratado de repartir culpas y borrar evidencias para proteger al deplorable López Obrador. Se confirma que lo de ellos son las mentiras más grandes y más indecorosas, además de recurrir a montajes poco creíbles. Su desesperación los lleva a inventar, insultar o calumniar a diestra y siniestra.

Todo esto es lamentable y se agrava con la presión internacional por el narcotráfico y la indudable colusión de autoridades federales y estatales de la 4T. Lanzan insultos contra ciudadanos que responsabilizan al expresidente que sigue dominando la política mexicana.

* NOS DECÍA EL GRAN escritor checo Franz Kafka (1883-1927): ‘Un idiota es un idiota. Dos idiotas son dos idiotas. Diez mil idiotas son un partido político’. Esto viene al caso por la campaña de afiliación que encabeza ahora un hijo de López Obrador, como palanca a su aspiración de adueñarse dentro de unos años del “legado paternal”, pese a que éste está básicamente compuesto de sangre, corrupción y decisiones absurdas, lo cual podría aumentar la improbabilidad. No lo olvidemos.

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