Peligrosos (as) al volante 1ª Parte
“El mejor automovilista es aquel que
conduce con imaginación …imagina
que su familia va con él en al auto”.
Henry Ford
He sido testigo de un sinnúmero accidentes de tránsito, que he llegado a pensar que los vehículos automotores y los mexicanos tenemos una relación casi suicida de comprensión y conducción terriblemente maquiavélica.
La forma de conducir rutinaria de muchos automovilistas tanto en calles como en carreteras, se ha convertido en un pasatiempo de laboratorio de su servidor cuando voy manejando y observando los errores de los conductores al manejar.
Desde su distorsión de percepción del riesgo, de la indiferencia a las vías de circulación, hasta la velocidad inmoderada en la que se conducen.
Absortos por la inseguridad y los homicidios dolosos, hemos pasado por alto que mueren muchas personas por homicidios culposos, casi siempre en accidentes de tránsito. Según datos del INEGI el año pasado a nivel nacional se registraron 362 mil 586 accidentes de tránsito en zonas urbanas y suburbanas, falleciendo 4 mil 125 y quedaron heridas 91 mil 713 personas. En San Luis Potosí hubo 853 homicidios, de los cuales dolosos fueron 453 y culposos -accidentes de tránsito- 398, (2 no especificados) y resultaron lesionadas 662 personas.
Y es que somos una dualidad de personalidad, ya sea abajo o arriba del vehículo, Jekyll y Hyde tropicalizados. Nos transfiguramos para mal, la falsa seguridad de estar encerrados entre láminas muta nuestra naturaleza en formas de hostilidad, impulsividad, ansiedad y violencia, si le sumamos que no sabemos conducir, el cóctel es casi siempre de consecuencias negativas.
Mire Usted, y lo comprueba ahora que salga a la calle o la carretera:
“Nadie guarda la distancia de seguridad” y pregunte ¿cuál es la distancia de seguridad al conducir? y se sorprenderá de las respuestas, bueno, a mí me dijeron que era “su-sana distancia”; “El peatón no es lo primero”, es lo último, añadiendo que tampoco sabemos caminar en la vía pública, las banquetas meramente ornamentales o invadidas; “Nadie señaliza sus maniobras al conducir”, pareciera ser que las intermitentes (no las impertinentes como decía un amigo en la prepa), y las direccionales, son accesorios que sobran y cuando por casualidad llegarán a utilizarse es porque ya están dando la vuelta; “Sentarse al conducir”, es toda una postura fashion, los hay los/las “tirando rostro”,“ tipo flemático”, “encuentro cercanos del tercer tipo (volante)”, “acostón comodín ”, “bíceps pack fuera de ventanilla”, etc.; “El conductor bobo”, me decía un amigo que me visitó de Monterrey, -que se había sorprendido que los potosinos al manejar van fisgoneando a los otros conductores y volteando para todos lados, menos al frente-; “Conductores caracoles”, súper lentos, amantes del carril izquierdo y central, por nada del mundo le harían caso al “carril de circulación derecho”, tuvieron un divorcio muy complejo, ¿por qué?, sólo ellos lo saben; “Espejos retrovisores y laterales artísticos”, para maquillarse o peinarse, unos y los otros re-direccionados para el piso o a las nubes, si no es que están colgados o pegados con cinta adhesiva, gris o café, las preferidas; “El/la frenona”, pie izquierdo pegado al freno, hasta el fondo que son ABC, o bloqueando las llantas (concatenado con todos de los de arriba).
TAPANCO: La OMS registra muertes al año en el mundo de 1.3 millones de personas en accidentes de tránsito, y entre 20 y 50 millones padecen traumatismos no mortales causantes de discapacidad. Los accidentes viales, constituyen una de las principales causas de mortalidad en todos los grupos etarios, principalmente entre personas de entre 15 y 19 años.
Francisco.soni@uaslp.mx
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