Inició el presente con un idea de J.R. de la Fuente …”.El panorama que enfrentamos no es alentador. Los hechos están ahí: las injusticias se multiplican, las desigualdades se agravan, la ignorancia crece, la miseria se expande. Alguien no está cumpliendo con su deber. Porque no puede, porque no quiere, porque no sabe, o acaso, porque no lo permiten aquellos que realmente nos gobiernan. …..”A quien le importa el futuro. Pág. 45, temas de hoy.2015.
Ahí está la pregunta ¿Quiénes realmente nos gobiernan? Bueno, cualquiera puede responder. Nos gobierna el presidente de la república y los gobernadores. Pues no, no es así de fácil la respuesta. Los ejecutivos, tanto el federal como los locales, gobierna, sí, pero están sometidos a una serie de presiones e intereses: políticos, económicos, financieros, ideológicos y mezquinos, tanto internos como externos, sobre todo el presidente de la república. Y mientras más ilegal e ilegítimo, sea su acceso al poder, más tienen que soportar y responder a esas presiones e intereses y actuar en consecuencia y en correspondencia. Muchas de las veces, son más difíciles de superar las presiones externas que las internas, considerando que México es una economía dependiente.
Históricamente los presidentes de la época posrevolucionaria 1917-1934, tenían que estar tocando puerta de la embajada de Norteamérica en México. Para suplicar al embajador en turno, que su gobierno los reconociera. Y, se, accedía al reconocimiento, siempre y cuando los presidentes se comprometieran a cumplir con ciertas “sugerencias” del gobierno del país vecino. Las cosas cambiaron en la forma, mas no en el fondo, de 1934 a la fecha, todos los presidentes ya electos (antes de tomar posesión) a excepción del actual, viajaban a Washington para que se les “leyera la cartilla” y así poder gobernar con cierta tranquilidad. Pero no haciendo enojar ni contraviniendo las “sugerencias y recomendaciones” del presidente norteamericano.
El único presidente que se fajo los pantalones, y fue precisamente con el caso de la revolución cubana, fue López Mateos, quien nunca rompió relaciones con el gobierno socialista de Cuba y no accedió al bloqueo económico impuesto por los EU. a pesar de las exigencias. Los demás países latinoamericanos tuvieron que lamberle las botas al presidente gringo. A otros presidentes hasta se les ha involucrado con la CIA. No ha sido nada fácil históricamente, mantener una relación bilateral armónica con los EU., ya ven como nos fue en el S. XIX. Así que saque Ud., sus conclusiones. Los norteamericanos, si tiene que ver con -- ¿quién nos gobierna? -- no del todo, pero de que Influyen, ni quien lo dude. No podemos ponernos con Goliat a las patadas.
A esta poder político externo, hay que agregar otro, el poder empresarial extranjero. México, no obstante ser la doceava u onceava economía mundial potencialmente hablando, no ha desarrollado la suficiente tecnología para pasar de una economía secundaria a una tercería, seguimos siendo un país “en vías de desarrollo” --ya hace como cuarenta años-- que estamos en esa categoría. Necesitamos por fuerza la inversión extranjera y para lograrla, tenemos que ceder, casi que regalar terrenos para que se instalen las trasnacionales, tenemos que hacer concesiones: fiscales y aportar la mano de obra barata, entre otras cosas. La inversión extranjera llega sí, pero a través de convenios muy favorables al gran capital, que restan soberanía al país y poder al presidente y a los gobernadores. Estos son los poderes políticos y empresariales externos que tienen que ver con ¿quién nos gobierna?.
¿Quién más nos gobierna, o con que otros poderes de facto se tiene que compartir el poder, para tener estabilidad política? O bien, para cumplir con los compromisos que los ejecutivos hacen para llegar al poder. Tratemos ahora la parte interna de las presiones y los intereses a los que tuvieron que someterse los ejecutivos; que no son menos difíciles que los externos, pero además, estos son más turbios y sórdidos; porque así lo admitieron voluntariamente los presidentes, entraron en complicidad, fueron parte de la degradación moral en que cayó el gobierno y después se convirtió en rehén de esos poderes de facto. Recordemos que nadie llega solo al poder, se accede al poder político a través del voto, pero necesariamente haciendo negociaciones, estableciendo compromisos. Pero hay de compromisos a compromisos. Y en México, los políticos realmente hicieron del gobierno un NEGOCIO. Bien lo dice el exsenador Ricardo García … ”Sin ideales, la política es mera gestión de intereses..”
En los últimos treinta años 1988-2018, el poder casi absoluto del presidente se fue perdiendo paulatinamente y lo perdieron porque tuvieron que compartirlo con sus cómplices. Con algunos empresarios corruptos (no todos los empresarios son deshonestos): con los eternos líderes sindicales charros y corruptos; con algunos medios que han hecho verdaderos negocios con el gobierno; estos, los medios, son conocidos como –el cuarto poder--; con los partidos políticos, principales semilleros de políticos pragmáticos, sin ideología, corruptos y que forman la nata del poder político que se mueve en función del olor del dinero; y con los otros dos poderes el legislativo y el judicial; donde también estamos viendo como aflora la corrupción y la impunidad.
El presidencialismo característica principal del sistema político del viejo régimen, dejó de funcionar. Los presidentes se involucraron tanto con las mafias del poder, formaron parte de los negocios mal habidos, ellos o a través de interpósitas personas, cada uno en su tiempo. Y ya cuando quisieron enderezar el barco, este ---el gobierno—ya había hecho agua y no tuvieron más remedio que nadar de muertito, entre todas las heces que ellos mismos propiciaron; cuando reaccionaron ya era tarde y fueron presa de esas presiones e intereses que no los dejaron gobernar a plenitud. Lo anterior a nival nacional y guardando las proporciones del caso, también pasó con algunos gobernadores.
Entonces ¿quiénes son los que realmente nos gobierna? Volvemos al párrafo con que iniciamos el presente…. ¿Por qué en México el panorama no es alentador? ¿por qué hay injusticia y desigualdad; miseria e ignorancia? Sabiamente JR. De la Fuente nos dice: alguien no esta cumpliendo con su deber. Porque no pueden, porque no quieren, porque no saben, o acaso, porque no lo permiten aquellos que realmente nos gobiernan. Así es, los que supuestamente nos gobiernan, los presidentes y algunos gobernadores, han sido ignorantes, no quisieron afrontar los retos que implica gobernar y aparte no pudieron, no los dejaron, porque fueron rehenes de los mismos monstruos que crearon con sus complicidades. Crearon cuervos para que les sacaran los ojos. Esos ultra poderes externos y los nefastos poderes internos son los que realmente nos gobiernan. Por eso estamos sumidos en la miseria, la desigualdad, la injusticia, la corrupción, la ignorancia, la impunidad, la violencia y la inseguridad.
jojih@hotmail.com

