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Y siguen

Por Carlos Pérez García

Septiembre 09, 2023 03:00 a.m.

A

Acabo de recetarme un Double Black con poco hielo y agua Topo Chico, ante una ligera lluvia tras el cristal. Quisiera estar ya en un nuevo tiempo en el que las dos contendientes se contrastan y compiten entre sí… hacia una mera continuidad, o bien rumbo a algo distinto y mejor (no del todo diferente, pues este país es el mismo con sus insuficiencias y presiones).

El artero patriarca que escogió y ungió como candidata a una de ellas por ser su copia más fiel, no va a dejar de ser el centro de atención y está dispuesto a seguir en su eterna campaña, aunque eso resulte inmoral e ilegal. No sólo pretende perpetuarse en el poder por sus privilegios, sino, en especial, anhela evitar auténticas evaluaciones (incluso juicios) o rendiciones de cuentas.

A la vez, ojo, sus narrativas tan mentirosas nos pueden parecer hoy inusuales y excepcionalmente perversas, pero en el siglo XIX, hace unos 170 años, Karl Marx (El Dieciocho Brumario) y Maurice Joly (Diálogo en el infierno entre Maquiavelo y Montesquieu) ya nos advertían con el caso de Luis Bonaparte en Francia que, según nos deja ver estos días Jesús Silva-Herzog Márquez, se observaban ciertos elementos:

i) con respeto a las apariencias, el voto puede convertirse en plataforma de la autocracia, y el poder del pueblo en herramienta de la arbitrariedad: para destruir la democracia, hay que usar los instrumentos de la democracia.

ii) el déspota es popular o no lo es… se apoya en el pueblo, pues ese es el a b c del usurpador para hacer cualquier cosa con plena impunidad; le dice a su pueblo que todo estaba mal y él ha sido quien los ha salvado del caos: ¿Me aceptas o quieres regresar al caos anterior a mi llegada?

iii) el demagogo en el gobierno se apropia del lenguaje de la denuncia y se desentiende de las responsabilidades del mando; es arbitrario, pero habla como si fuera una víctima indefensa ante enemigos poderosos, y se esconde bajo el manto de una conspiración permanente.

iv) cuando el presidente de la República Francesa percibió las instituciones como un estorbo a su ambición, dio un golpe de Estado y se libró de ese obstáculo; la Constitución limitaba sus poderes e impedía la prolongación de su mandato.

v) los hombres hacen su propia historia, pero no la que quieren: al dedicarse a transformar, a crear algo nunca visto, conjuran los espíritus del pasado en contra de la absurda pretensión de reescenificar la historia; las revoluciones auténticas ponen los recuerdos al servicio del futuro, pero cuando la revolución es un simulacro, el futuro se somete a esos maleficios del pasado.

Así, desde hace ya más de siglo y medio se podía entrever lo que ahora estamos viviendo en México. Tal como entonces, se pretende gobernar con palabras, muchas palabras. Los pueblos son contentados con comunicación… les suelen bastar las apariencias.

Fíjense ustedes, la propaganda es lo único que ha sido eficaz en el actual gobierno pues el presidente recrea los prejuicios sociales sobre el poder, la política y el propio gobierno. Es esta una mordaz demagogia de buenos y malos en la que él no tendría esos defectos que tanto cuestiona.

Pero los daños al país son reales, y para revertirlos se requerirá mucho tiempo y una participación social muy amplia y comprometida. Todo ello, más que nada, al valorar que resulta inaceptable continuar por el desastroso camino del despotismo obradorista.

El quinto Informe de Gobierno fue “la acostumbrada letanía de mentiras”, nos resume Macario Schettino; en tanto, la senadora de oposición recibía apoyos y se consolidaba en el Congreso como refrescante líder de la oposición, lo que aumenta aún más la inocultable rabia de Amlo.

Para tratar de detenerla ya enfilan todas las armas y artimañas en contra de ella, lo cual complica la ruta institucional que se había podido apreciar más factible. Hay quienes dicen: “No se hagan bolas, la competencia será entre Xóchitl y Andrés”, de tal forma que la ciudadanía tendrá que desafiar la utilización ilegal del desmedido poder del Estado.

Mucho habrá de suceder, y de evitarse. Al menos a mí me quedan ahora más claras las dificultades. Igual, esa lluvia se va entre un poco de sol.

cpgeneral@gmail.com

@cpgarcieral