Evita dañar tus alimentos con la refrigeración

El uso cotidiano del refrigerador en muchos hogares ha llevado a las personas a almacenar una variedad de comestibles; sin embargo, hay varios grupos de alimentos que no deben refrigerarse, ya que su condición puede empeorar con el frío y la humedad elevada.

La intervención del ingeniero francés Charles Tellier en 1876 marcó un hito en la evolución de la nevera, que se basó en un sistema de refrigeración desarrollado casi cincuenta años antes. Desde entonces, este electrodoméstico se ha vuelto popular en los hogares de todo el mundo debido a su practicidad.

Estos son los 7 alimentos que no deberían ir en el refrigerador

Hoy en día, prácticamente todos los hogares cuentan con una nevera que ayuda a preservar alimentos y bebidas por períodos prolongados. Sin embargo, el uso excesivo ha llevado a almacenar una variedad de alimentos, incluso aquellos cuya condición se ve deteriorada por el frío.

Según información del sitio web del medio ABC, estos siete alimentos no deben guardarse en la nevera:

1. Plátanos y frutas tropicales: Estas frutas no maduran adecuadamente en bajas temperaturas.

2. Chocolate: Puede desarrollar una capa blanquecina debido a la condensación del agua a temperaturas inferiores a 12-15 grados Celsius, su temperatura óptima.

3. Jitomate: Pierden su sabor y textura original, y su proceso de maduración se detiene en el frío.

4. Huevos: Si bien necesitan un ambiente fresco y estable, pueden guardarse en la nevera en un recipiente en la parte posterior.

5. Cebollas y ajos: La humedad y el frío en exceso afectan negativamente a estos alimentos.

6. Papas: El frío y la humedad aceleran la conversión del almidón en azúcar, afectando su textura, sabor y propiedades.

7. Quesos frescos: Aunque estos requieren refrigeración, los quesos curados pueden secarse, agrietarse y perder sabor y propiedades si se mantienen en frío durante mucho tiempo.