En pleno centro de la ciudad y a dos cuadras de Palacio de Gobierno, solitario delincuente perpetró violento robo, con un arma de fuego sometió a la empleada de una tienda de telefonía celular y tomándose todo el tiempo del mundo, maniató a su víctima con cinta canela, la encerró en el baño, para luego apoderarse de equipo de telefonía celular, efectivo y todo lo que encontró de valor, el monto de lo hurtado asciende a aproximadamente 400 mil pesos.
En un video difundido a través de las redes sociales se aprecia cuando el sujeto llega a la tienda de telefonía celular a las 19:30 horas, observa la mercancía e incluso hace algunas preguntas a la empleada, no compra nada y se retira, hasta ahí todo parecía normal.
Sin embargo, regresa a las 20:30 horas, pero ahora amaga a la empleada con una pistola que llevaba fajada a la cintura, la lleva a la parte posterior de la tienda, la obliga a sentarse en una silla y le da un rollo de cinta canela, indicándole que ella misma se la ponga, pero debido al nerviosismo, la joven no puede hacer lo que el delincuente le exigía.
El delincuente se da a la tarea de ponerle cinta canela en las manos, pies y boca, para luego encerrarla en el baño, él regresa a la tienda, abre la caja registradora y se apodera del efectivo, mismo que introduce en la mochila que llevaba consigo.
No conforme con ello, el maleante empieza a observar los equipos de telefonía celular y empieza a apoderarse de los más costosos, además se apodera de accesorios, todo lo va introduciendo a su mochila.
El robo dura aproximadamente 15 minutos, tiempo en el que incluso llegan algunos clientes interesados por la mercancía, el sujeto se da el lujo de contestar algunas preguntas de los clientes, todo lo hace con calma, no se apresura e incluso no se nota nervioso.
Una vez que se apoderó de todo lo que quiso, sale tranquilamente del establecimiento, llevando consigo la mochila y en su interior su botín, que se estima en aproximadamente 400 mil pesos.
La empleada de otro establecimiento nota la ausencia de la joven dependiente y al no encontrarla se comunica con el propietario de la tienda, para informarle que la empleada no está a la vista, poco después llega el novio de la joven víctima y entre todos la buscan.
Después de algunos minutos de búsqueda la víctima del atraco es localizada en el baño, es liberada de sus ataduras y se solicita la intervención de las corporaciones policiacas, aunque obviamente, para entonces ya es demasiado tarde y no fue posible capturar al delincuente.
El propietario del establecimiento y la empleada recibieron instrucciones por parte de las corporaciones policíacas, de acudir ante el agente del Ministerio Público a denunciar los hechos, para que la Policía Investigadora de la Fiscalía General del Estado continúe con la indagatoria.
