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Iglesia católica condena asesinato de Dariana y exige justicia

El vocero de la arquidiócesis se pronunció para que no se utilicen chivos expiatorios, sino que las autoridades realmente detengan a los culpables.

Por Martín Rodríguez

Septiembre 25, 2024 01:08 p.m.

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La iglesia católica potosina condenó el asesinato de Dariana, conductora de InDrive, quien fue víctima del crimen mientras desempeñaba sus actividades laborales.

El vocero de la arquidiócesis, Tomás Cruz Perales, señaló que, en el caso del asesinato de Dariana Margarita Posadas, la iglesia se solidariza con el dolor de la familia afectada.

Aseguró que "debemos estar unidos para pedir paz y consuelo para esta familia".

La iglesia se suma a la condena del asesinato y advierte que, desafortunadamente, las personas que cometieron el delito no son conscientes de las consecuencias de un hecho de esta magnitud.

Añadió que la delincuencia se ha endurecido y siguen ocurriendo estos hechos, pero probablemente quienes cometieron el delito estaban bajo los efectos de las drogas.

Cuestionado sobre frases como "siguen trabajando" o "seguimos investigando", usuales en las declaraciones de los funcionarios de la Fiscalía o del gobierno, advirtió que eso forma parte de la burocracia y los protocolos, pero se espera que pronto se esclarezca el crimen y, sobre todo, se capture a los responsables.

Se pronunció para que no se utilicen chivos expiatorios, sino que las autoridades realmente detengan a los culpables.

Añadió que hay una manifestación de dolor e impotencia en la sociedad, y que es válido que la gente se exprese, ya que no es justo que personas inocentes sufran las consecuencias de estos actos, pues los costos y las repercusiones afectan a toda la sociedad.

Aseguró que se espera que el caso se resuelva pronto, para evitar este tipo de situaciones o manifestaciones.

Finalmente, recordó que hay asesinatos que tienen una relevancia particular, pero la indignación en este caso se debe a la magnitud del hecho y al hecho de que la víctima era una mujer que estaba trabajando, lo cual hace la situación doblemente lamentable.