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Las exportaciones de tomate del Centro de Producción Santa Rita podrían verse afectadas por un conflicto comercial entre el vecino país del norte y México que podría llegar a la imposición de aranceles a los envíos del producto a su principal mercado.
La empresa de propiedad estatal es una de las cientos de compañías mexicanas que en 2013 firmaron con el Departamento de Comercio de Estados Unidos un acuerdo para suspender una investigación por presunto “dumping”, es decir, la entrada de tomate mexicano a Estados Unidos a precios considerados por debajo del costo real de mercado por sus contrapartes de Estados Unidos.
La queja data de 1996, y fue promovida por productores de Florida. El gobierno de Estados Unidos firmó con productores de México, entre ellos Santa Rita, un acuerdo para suspender la indagatoria a cambio de fijar una cuota mínima de importación, que fue refrendado en varias ocasiones, pero que vence este año.
En febrero de ese año, el Departamento de Comercio anunció que no planea reanudar el acuerdo y reanudará la indagatoria, que podría obligar a los exportadores a pagara una garantía en tanto dura la investigación.
Si se determina que hubo “dumping”, Estados Unidos aplicaría aranceles a los envíos de tomate mexicano.
Santa Rita aparece en la lista de empresas que se adhirieron al pacto, de acuerdo a un documento del Departamento de Comercio. La empresa potosina aparece bajo el registro A-201-420-430.
En el listado también se identificó a otras tres empresas del estado: Invernaderos Potosinos SA de CV, que tiene su producción en San Felipe, Guanajuato, pero sus oficinas están en la capita; y Eco Agritec, de Ciudad del Maíz y Cedral Greenhouse, ubicada en ese municipio del Altiplano.
Los productores mexicanos han querido iniciar negociaciones para renovar el acuerdo, pero Estados Unidos ha evadido la propuesta.
Si no cambia el panorama, a partir del 7 de mayo, los exportadores mexicanos deberán pagar garantías para poder exportar.
