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La Parroquia de Nuestra Señora de la Soledad reiteró la invitación a todas las madres de esta congregación a que lleven a sus hijas a ofrecer flores a la Virgen María como parte de la tradición de mayo, mes dedicado a esta importante figura de la cristiandad.
Además de las flores, en el templo se realiza el rezo del Santo Rosario todos los días del mes y se espera que, al final, se realice la coronación de María con las niñas que más hayan asistido a honrar a la madre celestial.
El origen de esta tradición se remonta a los tiempos del Imperio Romano, cuando el calendario tenía solo 10 meses de 36 días: El año empezaba en marzo, mes dedicado al dios de la guerra, Marte, al que seguía abril o mes de “aperire” que en latín es abrir, en alusión a que en este mes se abren las flores y la vida despierta de su letargo invernal.
Después venía el tercer mes del año: Mayo, dedicado a la diosa Maya. En este mes, las chicas romanas salían a las calles vestidas de blanco haciendo ofrendas de flores y cánticos para pedir a esta diosa por su fertilidad. Al imponerse la religión católica en los antiguos territorios romanos, este rito se convirtió en la ofrenda de flores a la Virgen María.
