¡Renueva tu casa!

Meses después de luchar contra el Covid-19 muchas cosas ya no son como antes, como por ejemplo las prioridades y las funciones clásicas de cada habitación. 

Te contamos lo que ahora mismo deberías tener en cuenta para adaptarte mejor que nadie a los nuevos tiempos.

RECIBIDOR

Hasta ahora estaba de lo más subestimado, pero con todo lo que ha ocurrido en los últimos meses se ha convertido en un espacio vital.

¿Por qué? Pues porque en estos momentos actúa como un escudo entre nuestro hogar y la calle y, por si fuera poco, es donde eliminamos cualquier tipo de amenaza que hayamos podido traer a casa del exterior.

Siempre es de agradecer una repisa en la que tener a mano elementos imprescindibles como las mascarillas, los guantes o los geles desinfectantes, así como una pequeña papelera en la que puedas deshacerte del material ya utilizado o contaminado. 

Aunque tengas un rinconcito para dejar los zapatos, el bolso o el casco de la moto, no olvides aligerar esos metros cuadrados de elementos superfluos que en estos momentos no tienen tanta importancia.

COCINA

Del mismo modo que en el recibidor, en toda buena cocina deberíamos disponer del espacio necesario para poder dejar las bolsas de la compra en un santiamén y limpiar los productos fácilmente con un paño de lejía.

Esa zona despejada, puestos a pedir, podría tener una superficie de plástico a la altura de la cintura para depositar las bolsas sin esfuerzo y no tener que agacharnos cada vez que queramos desinfectar un artículo.

BAÑO

La pica, por razones que puedes imaginarte, también tiene un mayor valor que antaño.

Así que, si siempre habías querido invertir en una de mayor tamaño, sí, ahora es el momento. Y ya no hablemos de los grifos. 

La grifería que cuenta con sensores automáticos electrónicos está muy cotizada, y lo mismo puede decirse de aquellos grifos que permiten que el agua salga con un botón estratégicamente colocado en el caño alto.

Estos últimos son mucho más limpios y se pueden encender y apagar con el codo.

SALÓN

No solamente el orden es el gran pilar de cualquier hogar, sino también la limpieza. 

Un sofá desenfundable siempre es muy agradecido porque facilita que pueda lavarse cada poco tiempo. 

Y esto mismo también lo deberías aplicar en todos los textiles que tengas en casa, incluidas las alfombras o esas cortinas con tratamiento antimanchas que tan de moda se han puesto recientemente por razones más que obvias.  Todo lo que facilite el día a día siempre es bienvenido.

ZONA DE TRABAJO

Generar el mínimo de residuos posibles mientras trabajamos es muy importante, por lo que tener una papelera a mano marca la diferencia. Obviamente, dadas las circunstancias, recuerda desinfectar el teclado y el ratón de tu ordenador las veces que sean necesarias. 

Siempre es mejor pecar de limpio y precavido que llevarse una ingrata sorpresa.

DORMITORIO INFANTIL

Del mismo modo que tienes tu zona de trabajo, los más pequeños también deberían disfrutar de un lugar en el que puedan jugar libremente o, simplemente, hacer las tareas del colegio.

Evita que lo hagan en el salón, y más si no tienes la suerte de presumir de un despacho propio y no te queda otra que teletrabajar ahí. 

A pesar de que todos viváis en el mismo techo, delimitar los espacios es una regla no escrita de la convivencia.

RECÁMARA PRINCIPAL

Ventilar la casa tiene un sinfín de beneficios en nuestra salud, así que imagínate cuando haces eso mismo en la habitación donde duermes y cargas las pilas cada noche. 

Debes hacerlo cada día, sin excepción, tanto después de despertarte como unos minutos antes de meterte en la cama. 

Y lo mismo puede aplicarse a la ropa.

Por ejemplo, un perchero en el dormitorio para colgar el pijama nunca estorba.

Al contrario.