Reforma al sistema de pensiones en México: Opiniones y desafíos

El 7 de enero, en el marco del aniversario de la huelga de trabajadores de un fábrica de textiles en Río Blanco, López Obrador prometió una Reforma al sistema de pensiones mexicano, ya que según sus propias palabras

"Es completamente inhumano, injusto, que un trabajador después de 30 años de estar laborando, cuando termina ni siquiera recibe su salario cuando estaba activo, sino la mitad, si le va bien¨.

Las intenciones del AMLO buscan remediar la criticada reforma impulsada por Zedillo en 1995, que cambió el sistema de repartición bajo el cual se regían las pensiones desde 1973, por el sistema de cuentas individuales que entró en vigor en 1997.

Pero, qué piensan los mexicanos de todo esto, la realidad es que según la empresa X-DATA, 19 millones de mexicanos ni siquiera saben en que Administradora de Fondos para el Retiro (AFORE), se encuentran sus ahorros, lo que de inicio hace evidente una cultura de desinterés al respecto.

Este nivel de despreocupación al respecto es alarmante, porque según cifras mundiales, lo ideal es que un trabajador obtenga una pensión de al menos el 70% de su sueldo, pero según CONSAR, en México, bajo la ley 97, los trabajadores recibirán de un 25% a un 30% de su sueldo.

Si a estas cifras le añadimos que aproximadamente 31.3 millones de personas trabajan en la informalidad, lo que equivale al 56.2% de la población económicamente activa, tenemos un panorama no solo desalentador, sino preocupante.

Sin embargo, no podemos olvidar que el régimen de Ley 73, aunque era beneficioso para los trabajadores, no era sostenible a largo plazo. Bajo este sistema de pensiones, los trabajadores se podían pensionar con un promedio de sus últimos cinco años laborados, monto que variaba de acuerdo a las semanas de cotización.

El pago de estas pensiones correspondía al IMSS, y uno de los problemas fue que, el número de trabajadores pensionados, empezaron rebasar el número de trabajadores activos, por lo que los recursos para el pago de pensiones, así como los malos manejos de los fondos para el retiro de los trabajadores, hicieron que fuera imposible seguir manteniendo este sistema de pensiones.

En conclusión, es evidente que se requiere una modificación al sistema de pensiones, que realmente resulte en beneficio de las y los trabajadores, pero también es importante mirar al pasado y ver qué errores no se pueden volver a cometer.