Superpeso ya vale 20.55 pesos argentinos; estaba en 6.10 hace un año

CIUDAD DE MÉXICO, agosto 14 (EL UNIVERSAL).- El peso argentino se hunde en los mercados internacionales luego de la sorpresiva victoria de Javier Milei, del partido La Libertad Avanza, en las elecciones primarias que se llevaron a cabo el domingo de cara a la contienda general del 22 de octubre.

El hombre de 52 años perteneciente a la Escuela Austriaca de pensamiento económico pretende reconstruir a Argentina aplicando varias reformas que incluye eliminar al banco central y al peso argentino, así como adoptar formalmente el dólar, el euro u otra moneda que la población elija.
Consciente de que "la inflación es siempre y en todas partes un fenómeno monetario", el libertario Milei quiere eliminar el peso para lograr "el fin de la inflación", cuya tasa llegó a 116% en junio pasado, la cuarta peor del planeta y 24 veces mayor que en México.
Tras la contundente victoria de Milei, el peso argentino se desplomó en los mercados internacionales y es la moneda más perdedora este lunes. El Banco Central de Argentina salió al rescate aumentando su principal tasa de interés de 97% a 118% ante la falta de fondos para respaldar su moneda, señaló Bloomberg.
La autoridad también devaluó el peso argentino en el mercado mayorista y fijó el tipo de cambio en 350 unidades por dólar hasta las elecciones de octubre, según comentó una fuente oficial a la agencia Reuters.
Al iniciar la semana, la moneda mexicana se fortalece 21% contra el peso argentino. Ahora cada superpeso mexicano equivale a 20.55 pesos argentinos por primera vez en la historia, mientras que en 2022 la paridad estaba en 6.10 unidades. Hace sólo cinco años, las divisas de México y Argentina tenían el mismo poder adquisitivo, es decir, cada peso mexicano equivalía a uno argentino, de acuerdo con cifras de Bloomberg.
El colapso del peso argentino se debe a que en los últimos años el Banco Central de Argentina aceleró la emisión de pesos para financiar el déficit del gobierno de Alberto Fernández , lo que se conoce como "señoreaje".
A partir de 2020, el país sudamericano imprimió pesos por cerca de 16 puntos de su Producto Interno Bruto (PIB). "El problema no es que en la Argentina falten dólares, sino que hay un exceso furioso de pesos", ha explicado Milei en repetidas ocasiones.