EL MUSEO DEL VIRREINATO Y SU ESENCIA CARMELITA

Situado en un edificio del siglo XIII en el corazón de nuestra capital potosina, el entonces Convento de Carmelitas Descalzos, un monumento original de la época y período novohispano, ha sido, desde septiembre del año 2003, un espacio dedicado a difundir la cultura, la identidad y los valores del período virreinal en México, pero, sobre todo, la esencia conventual que aún guarda este recinto en sus pasillos, salas y paredes. 

HOY, LA FESTIVIDAD DE NUESTRA SEÑORA DEL MONTE CARMELO

Hoy, día en que la Orden Carmelita celebra la festividad de Nuestra Señora del Monte Carmelo, denominada comúnmente como la Virgen del Carmen, el arquitecto Mario Andrés Hernández, actual historiador del Museo del Virreinato, nos comparte la historia y relación del recinto cultural con la orden mendicante, misma que aún perdura vigorosa en tierras potosinas.

Desembarcando en el Puerto de Veracruz, la Orden Carmelita llegó a México en 1585, donde comenzaron a crear distintas fundaciones en todo el territorio de la Nueva España, siendo la última en San Luis Potosí. Posteriormente, en el año de 1749, fundan el Convento (Museo del Virreinato) consagrando el templo hasta 1764, siendo este, uno de los conjuntos conventuales más grandes del estado. 

PATRIMONIO MUNDIAL  DE LA HUMANIDAD

Declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO en el año 2018, este espacio es considerado el único convento religioso abierto al público para su visita y recreación en todo el estado de San Luis Potosí.

Cabe destacar, que el recinto resguarda importantes vestigios arquitectónicos entre los que destacan el claustro (actual patio central), el antiguo Colegio del Sagrado Corazón (en la parte alta) y la Capilla Doméstica (en el segundo piso) misma que permaneció cerrada al público durante más de seis décadas y que recientemente, ha sido “prestada” al museo, pues esta sigue perteneciendo a los frailes, Capilla de la que hay que resaltar, conserva la cúpula original del Siglo XVIII.

Además de la Tribuna original, un excepcional espacio que conecta al museo con el Templo del Carmen, y donde antiguamente algunos frailes que, por alguna condición referente a la edad o a la salud, no podían descender al templo.

TRANSFORMACIONES

Tras el paso de los años, el espacio que hoy resguarda al museo ha pasado por numerosas transformaciones, pues ha fungido como sede de asilo de huérfanos, masonería, oficinas de la Secretaría de Salud e incluso como almacén de armas, hasta su rescate por la entonces administración de Fernando Silva Nieto, que se convirtió en este espacio donde se presentan diversas obras de destacados pintores, mobiliario de la época, visitas guiadas, conciertos y conferencias entre otras actividades. 

CONVENTO DE LA ORDEN CARMELITA

Sin duda, un lugar excepcional que tras sus paredes guarda un sinfín de historias envueltas en la esencia original del Convento de la Orden Carmelita en nuestra ciudad. 

Por su parte, Elizabeth Rodríguez, Directora General del Museo del Virreinato, nos comparte alegre y entusiasta el progreso y transformación positiva que ha logrado en conjunto con su equipo para reactivar y dar nueva vida a este espacio que, sin duda, regala a los espectadores una experiencia llena de memoria a través de cada detalle, cafa aroma y cada pieza que en él podemos apreciar. 

“Para mí estar al frente del museo representa un gran reto, porque estaba un poquito olvidado, pero ya le estamos dando vida otra vez. Estamos tratando de generar un cambio positivo”.