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El fabuloso municipio 59

Por Adriana Ochoa

Junio 12, 2022 03:00 a.m.

El gobernador lo dijo sin lugar a imponderables: Villa de Pozos, delegación del municipio capitalino de San Luis Potosí, volverá a ser municipio, el número 59 de la entidad.

Tiró de un viejo reclamo de poceños nativos para darle un giro justiciero a su anuncio: Pozos fue municipio desde la conformación del estado de San Luis Potosí y perdió esa condición en 1946, junto con otras cuatro demarcaciones: Huehuetlán, Villa de Arista, Agua Buena y Tierra Nueva.

Los diputados de la época, bajo el signo de Gonzalo N. Santos, esgrimieron la pobreza de esos ayuntamientos para eliminarlos o fusionarlos. Que no tenía caso “mantener autoridades que no tienen nada que administrar”.

Historiadores y cronistas atribuyen motivaciones políticas a esa degradación, por presencia y actividad sinarquista, el movimiento nacionalista y católico que décadas después derivó en el Partido Demócrata Mexicano. Tres de los municipios desaparecidos por pobreza recuperaron su categoría años después; Pozos no.

Adosado a la cabecera municipal capitalina, Pozos albergó la industria como zona extrarradio. En 2002, el gobernador priista Fernando Silva Nieto, publicó un decreto que creaba de nuevo el municipio de Villa de Pozos. El ayuntamiento de San Luis Potosí, entonces panista, promovió una controversia constitucional. La Suprema Corte anuló el decreto en 2004 porque no convocaron a plebiscito sobre el tema a todos los ciudadanos del municipio.

La convocatoria a plebiscito está vigente en la constitución local y la reglamentación respectiva se amplió. El gobernador Ricardo Gallardo Cardona hizo ruido, pero no revisó la Constitución, tampoco la Ley Orgánica del Municipio Libre. Para él, su sola ocurrencia, votada por un Legislativo con mayoría oficialista y oposición floral, era suficiente.

La llegada de dos armadoras convirtió a San Luis Potosí en una plaza importante de la industria automotriz. El ayuntamiento calcula que en las próximas tres décadas se construirán en la delegación unas 35 mil viviendas. Más población significa mercado, pero también una gran bolsa de votos.

Hay quien interpreta el anuncio del gobernador como una revancha por la disputa de reflectores con el alcalde potosino, el priista Enrique Galindo Ceballos. Tiene Gallardo una propensión a acaparar el espectro mediático y de las redes, pero también es un político pragmático y ha trepado por donde nunca se le vio llegar.

En la pasada elección municipal, el gallardismo ganó Pozos con un voto dividido. Tuvo ventaja en áreas habitacionales populares, asignadas a crédito por Infonavit, así como en una parte de la cabecera y rancherías. El contraste electoral lo hicieron los “cuarteles” (barrios fundacionales), zonas tradicionales relacionadas con arraigadas festividades católicas y los nuevos fraccionamientos cerrados de clase media industrial. 

Si bien el anuncio de la remunicipalización surtió extendida lectura como golpe político para arrebatar a la capital del estado su industria, el edil capitalino no se inscribió a conflicto. Informó que esperará lo que determine el plebiscito, si lo hay, y que en tanto esa consulta se realiza, atenderá sus responsabilidades con la delegación.

Se llevará tiempo, y dinero, cumplir los requisitos que marca la ley para erigir un municipio. La iniciativa para plebiscitar debe ser del 25% de los ciudadanos inscritos en la lista nominal de electores de la circunscripción. Además, Pozos deberá demostrar que tiene los recursos para cubrir los gastos de la naciente administración.

El gobierno no se esperaba los costos y el jefe del Congreso local declaró muy campanudo que el plebiscito deberá pagarlo con sus recursos el Consejo Electoral y de Participación Ciudadana, “porque este año no hay elecciones”. La autoridad electoral reviró: si no le dan presupuesto, no hay consulta.

La novela promete ser larga. Para los nativos de la delegación que anhelan un ayuntamiento poceño desde hace 75 años, el festejo puede ser muy corto. Si se distraen demás, no sería la primera vez que políticos con mucha jeta y un avecindado exprés gobiernen una comunidad en la que no pueden ir ni a la tienda de conveniencia más cercana sin Waze o Google Maps.

LA TIRA DE LAS NETAS

EL IMPERIO DE LAS OCURRENCIAS

“A mí me preguntan qué es la 4T y yo no sé qué responder”.

Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, ex candidato presidencial de la izquierda y ex jefe de gobierno de la Ciudad de México, sobre la improvisación permanente del actual gobierno y la falta de proyecto de nación a largo plazo. Cárdenas presentó su libro “Por una democracia progresista”, een el que explica que “no hay en el país continuidad a las políticas públicas, sino improvisación y ocurrencias”. Aristegui Noticias (26/V).

NO CULPES AL ADN…

 “Basta con comer un exceso de 100 calorías al día para ganar unos 4,5 kilos al año”.

Cecilia Lindgren, genetista experta en obesidad del Instituto de Macrodatos de la Universidad de Oxford, quien desecha la existencia de “un gen de la obesidad” y explica en cambio que sí puede haber una predisposición marcada por el ambiente alrededor de la persona obesa, con comida no saludable a su alrededor. El País (25/V)

“Cuanto menos capaces son quienes se meten en política, más egoístas y narcisistas son”.

Richard Sennet, sociólogo, profesor de la London School of Economics, sobre la distancia de los políticos respecto de los problemas cotidianos de la gente. El País (12/VI).