Delitolitis
“Nadie incurre en delito
empujado por el destino”.
Lucio Anneo Séneca.
Comentando algunos temas de inseguridad con algunos colegas y asesores de seguridad surgió el tema de los delitos que se cometen en México. Y alguien refirió que lo que está pasando es que nos estamos contagiando de “delitolitis”. Esto es que fácilmente ya todos hablan de los delitos que supuestamente se realizan y dan por hecho éste suceso, como algo real, que sucedió, está sucediendo y seguirá sucediendo. Y dan un diagnóstico: Incidencia Delictiva. La enfermedad que origina el contagio de la “delitolitis”.
El gobierno federal nos dice que la “incidencia delictiva” es la que se refiere a la “presunta ocurrencia” (con esto deja abierta toda posible especulación al respecto), de delitos “registrados” (otra gran avenida de lo que significa “registrar” un delito en México), en averiguaciones previas ya iniciadas, o en carpetas de investigación, “reportadas” (o sea que usted o yo tuvimos la necesidad que asistir a una Fiscalía o Procuraduría de Justicia a decir para que quede registrado que alguien nos afectó un bien jurídico tutelado).
Así llegamos a “Quien coños me ha robado el mes de abril”, con 179 mil 87 delitos “denunciados” en México, en San Luis Potosí 4 mil 704, Yucatán únicamente 357 y el Estado de Mexico con 34 mil 246 delitos denunciados. No obstante, en nuestro país solamente alrededor del 10% de delitos se denuncian a las autoridades, una cifra negra calculada de 93.3%.
Desde la antigüedad, el delito se ha tratado de explicar de muchas maneras dividiendo posturas respecto a la materialización del mismo y sobre todo aquellas que deben interpretarse políticamente, muy de la mano el componente social de afectación norma-delito, a juzgar de los legisladores.
Se echan campanas al vuelo cuando algún político grita que logró disminuir los delitos, nada más falso, el delito como tal es dinámico, cambia en el tiempo y en el espacio, su estructura es variable y perecedera que se sujeta a una estricta interpretación histórica-geográfica, política, social y las más de las veces circunstancial y otras por causas de fuerza mayor, por ejemplo: Una pandemia.
TAPANCO: En abril hubo 10 mil 214 víctimas de homicidio doloso y feminicidio a nivel nacional y al comparar con el mismo periodo de 2021, “disminuyó” en un 12%. Sí, pero los “desparecidos” no están en las estadísticas. Un promedio de 85 homicidios y feminicidios diarios. Con una tasa homicida por 100 mil habitantes de 26.6 con un promedio anual de 94 homicidios diarios. En Estados Unidos de Norteamérica tienen una tasa homicida por 100 mil habitantes de 7.8 y están preocupados porque es una de las tasas más altas desde 1995, aunque en los años 70´y 80´tenian una tasa de 10 homicidios.
¿Cómo sesgar la información delictual? Un ejemplo: Dice el gobierno federal que únicamente hubo 272 secuestros a nivel nacional, pero los delitos contra la libertad personal fueron 8 mil 883 víctimas, se “comieron”, 97% de los delitos, aparte, el delito contra la libertad personal tuvo un incremento del 13% comparado con el año pasado.
Es difícil saber cuántos delitos se cometen en realidad, sin la aplicación de la delitología y la construcción de una antropología criminal multifactorial. Por el momento, solo seguiremos contándolos y mal.
Francisco.soni@uaslp.mx
Twitter: @franciscosoni
