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En la calle de Ignacio Aldama, a una cuadra de la Presidencia Municipal de Soledad, una tapa metálica de alcantarilla cayó al fondo dejando un peligroso boquete justo en el paso de las llantas de vehículos y ciclistas.
Por si esto fuera poco, a media cuadra hacia el norte y sobre la misma calle, otra alcantarilla sin tapa, esta vez de concreto, incrementa el riesgo de accidentes.
Al parecer, en el primer caso la tapa metálica sucumbió al peso de los camiones que la mayor parte del día transitan sobre la calle de Porfirio Díaz en dirección a la salida de la cabecera municipal.
Pasando sobre esta calle y su cruce con Ignacio Aldama, el transporte pesado provocó que la tapa se moviera y cayera hasta el fondo de la oquedad del drenaje.
Parte de la rueda metálica se puede apreciar a simple vista, así como bolsas de basura y hasta una hielera de unicel que la gente “cochinona” arrojó ahí aprovechando el boquete.
La reparación de este desperfecto deberá ser inmediata, pues ayer mismo se pudo apreciar que más de un automóvil sufrió daños en la carrocería cuando su conductor no alcanzó a ver a tiempo el hoyanco. El mayor riesgo, por supuesto, es para ciclistas y motociclistas que podrían sufrir una aparatosa volcadura y lesionarse de gravedad.
