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Ciudad de México. - La cinta mexicana “Placa de acero”, dirigida por Abe Rosenberg, es una mezcla de acción y comedia que cuenta la historia del incorruptible policía “Roberto S. Recto”, que encarna Alfonso Dosal, y su compañero Adrián Vázquez, nombre del mismo actor, un holgazán y corrupto guardián de la ley.
En entrevista, Adrián Vázquez, actor con una trayectoria de más de 25 años en teatro, platicó de su experiencia como coprotagonista de la cinta, la cual calificó de direfente ya que “toma riesgos que no se acostumbran en el cine mexicano”, enfatiza.
“Esto es algo que no se ve en nuestro cine. Los Almada lo hacían con mucho éxito de taquilla, pero con resultados pobres cinematográficamente hablando. En “Placa de acero”, se le apuesta al misterio y a la acción, cimentada en una comedia irreverente, muy mexicana, groserona y divertida”, afirmó Vázquez.
TRAMA
Al cuestionarle a Vázquez, quien también aparece en la cinta Polvo, recientemente estrenada, si lo que verá el público en una película al estilo de Omar Chaparro o Eugenio Derbez, afirmó en tono de broma: “¡No. Dios nos libre! Justo es lo que quisimos evitar. Aquí no hay una figura híper famosa. Dosal es un actor que surgió del teatro y regresa constantemente a él y yo tampoco tengo esa imagen”, afirmó.
“Desde ahí que es una película que arriesga. Pero también el sentido del humor es diferente. Apela a un humor muy mexicano. No es, como acostumbran otras cintas, una imitación del estilo gringo, de comedia tipo Friends o The Big Band Theory”.
PERSONAJES
Dijo que el papel de policía corrupto y perezoso que hace en la cinta, maneja humor muy cercano a nosotros. Además, “vemos locaciones que difícilmente se muestran en el cine mexicano. De pronto personajes descienden al drenaje profundo o aparece submarino. Se tuvo que construir un set con una alberca enorme, para meter la nave”.
El espectador verá en la cinta, explicó Adrián, “corretizas en las calles de la ciudad, peleas con artes marciales raras, de producción nacional. Y locaciones que nos muestran una cara de la Ciudad de México que no conocíamos. Más parecida a favela o un barrio del Bronx”.
En este sentido, dice, el trabajo del director es muy loable “porque intenta una estética para la película; la producción se tomó mucho tiempo en localizar los sitios que pudieran corresponder con lo que buscaba la película que se estrenará el 15 de noviembre.








