Interapas, el fin Nuevo-viejo tren
Con casi 28 años de antigüedad, el Interapas tiene los días contados. El Congreso del Estado proyecta desaparecerlo, hay dos alcaldías reportadas por un diputado que dicen estar a favor y el Ayuntamiento más grande hasta creó su propia área de administración del agua. Sin embargo, todavía falta desahogar procesos legales y administrativos que, al menos en papel, se espera que no repitan el fiasco del intento de remunicipalizar Villa de Pozos, sin atender derechos de habitantes que se inconformaron y consiguieron mantenerse en el estado en que se encuentran, con su delegación y su territorio.
????
A diferencia de la capital, en Soledad y Cerro de San Pedro, hay una pretendida idea de que el Gobierno del Estado asuma el control de la extracción, distribución y disposición final del agua y el razonamiento es obvio si se considera que desde la creación del organismo operador, Soledad es un municipio que ha ejercido un papel marginal en la administración del agua. Atraer la operación de su sistema, sería una idea políticamente seductora para el gobierno estatal, pero también y al menos mientras gobiernen el mismo partido en el palacio grande y en la alcaldía soledense, técnicamente el estado le haría la tarea, pero obviamente también cobraría el agua.
????
El gobierno estatal también administra servicios de agua potable y el ejemplo visible se ubica en Ciudad Satélite, donde el que alguna vez fue el Instituto de la Vivienda del Estado (Invies) desarrolló el proyecto que incluyó la compra de derechos de extracción de aguas subterránea, autorizados por la Comisión Nacional del Agua y entregados a la Comisión Estatal del Agua (CEA) para la extracción y distribución a las viviendas. Inexperto, el gobierno estatal no es, pero la preponderancia de la administración del agua corresponde a los ayuntamientos, según el todavía vigente Artículo 115 de la Constitución federal. La autonomía municipal autoriza a manejar el propio sistema de agua potable. Fuera de la grilla barata queda desencadenado el tema, ahora les toca tejer una exposición de motivos convincente para que el gobierno estatal atraiga el agua de las alcaldías.
????
No será cosa fácil atraer una inversión ferroviaria como la pretendida del tren de pasajeros, que desde que el domingo 6 de septiembre de 1997, que partió por última vez de Monterrey, no circula por las ferrovías mexicanas. Por entonces, los trenes jubilados ya eran unidades sin mantenimiento, máquinas muy viejas, pero eso sí, con algunos vagones de lujo. El olor a viejo se respiraba en todo el convoy, pero también la nostalgia de aquellos que dejaron de vender sus alimentos preparados para los viajeros, de los que dejarían de ir a Estación Catorce o aquellos que se aventuraban a llegar hasta Nuevo Laredo. Ahora las cosas cambiarán.
????
En uno de sus pronunciamientos, la presidente electa de la República anunció acuerdos con la iniciativa privada para invertir. Más vale que la izquierda mexicana dé ese giro histórico de dar luz verde la intervención de las asociaciones público privadas para realizar los proyectos. Meter un tren de pasajeros en las vías luego de 27 años de ausencia, costará mucho en materia de planeación y redefinición de horarios de trasiego de carga pesada. Lo cierto es que por falta de visión, el propio firmante del decreto, Ernesto Zedillo Ponce de León, y los presidentes sucesores, ni siquiera se interesaron en recuperar el recorrido
de pasajeros.
????
¡HASTA MAÑANA!
