Elecciones 2021
El 6 de junio de 2021 los mexicanos elegiremos a quienes integrarán la nueva Cámara de Diputados; en 15 estados se elegirá al titular del poder ejecutivo; congreso local en 30 entidades federativas; ayuntamientos y alcaldías en igual número de entidades; las estrategias y debate político ha iniciado, los actores buscan a sus aliados políticos que les generen las condiciones y los recursos para obtener el triunfo en las urnas; se ha iniciado un posicionamiento en torno a las principales necesidades de la sociedad y el cuestionamiento de las acciones de los gobiernos en turno.
El sistema político mexicano esta integrado por una gran diversidad de actores políticos con perspectivas ideológicas e intereses diversos, quienes han logrado establecer las reglas formales e informales que hacen posible el acceso al poder político; estos acuerdos se hicieron en un contexto social homogéneo, donde la sociedad se le veía como un todo coherente, por lo que tomar decisiones solo requería de la presencia de un presidente de la república y/o gobernador del Estado que atendiera las demandas de los actores con mayor poder político.
El sistema político fue centralizado, contó con instrumentos de negociación como los puestos de elección, en la administración pública y los beneficios que otorga la aplicación del gasto público; los acuerdos se hacían entre pocos actores políticos, el resto solo obedecía las decisiones que habían tomado; el electorado se le consideraba como un actor que solo debía acudir a las urnas, sin cuestionar, sin reflexionar su voto; sin embargo, esta forma de estrategia política ha entrado en crisis, ya no es eficaz para obtener los puestos
de elección.
El sistema político no se ha transformado pero la sociedad si lo ha hecho; tenemos un electorado predominantemente joven, con educación, informado, que tiene la capacidad de cuestionar las decisiones que toma la clase política, que no le convencen los perfiles que imponen los partidos políticos, que buscan su desempeño a lo largo de sus carreras políticas y lo valoran, que reflexionan sus posicionamientos ante los problemas y necesidades de la sociedad; es un electorado que ya no sabe obedecer sino cuestionar.
México tiene un sociedad plural en sus ideas y fragmentada en sus necesidades e intereses; pero prevalece una clase política cerrada, que no se renueva, que toma decisiones cupulares; que se hereda los puestos políticos entre un pequeño grupo, donde importa más el parentesco familiar que el conocimiento técnico y las demandas de la sociedad; existe una sociedad democrática en sus ideas, que todos los días busca espacios para expresarlas, pero no sucede lo mismo en la clase política, quienes privilegian los acuerdos de unos cuantos.
Hacer política utilizando los instrumentos tradicionales como los acuerdos entre pocos actores, la herencia familiar de los puestos políticos y la designación de funcionarios y trabajadores de los tres niveles de la administración pública con base en criterios políticos contribuye a generar un gobierno ineficaz, que no resuelve los problemas y necesidades de la sociedad, lo que sin duda llevara a una crisis de eficiencia en la implementación de las políticas públicas, de credibilidad en la acción de gobierno e ingobernabilidad de la sociedad.
Estamos viviendo tiempos que demandan la transformación del sistema político; se requiere el ingreso de nuevos actores, que representen la pluralidad de necesidades e intereses de la sociedad; toma de decisiones participativas y transparentes; análisis y discusión de las ideas de manera de abierta y tolerante; debate de los problemas públicos a partir de sus causas y no de sus consecuencias; terminar con la estrategia política sustentada en la oferta, que no toma en cuenta la capacidad de la estructura gubernamental para identificar soluciones.
En síntesis, la sociedad joven, plural y heterogénea del México de hoy demanda la renovación del sistema político, que deje de poner énfasis en la eficacia de la política, para transitar a la efectividad de las políticas públicas del gobierno; se requieren acuerdos y pactos participativos y transparentes que reflejen las necesidades y demandas locales; la sociedad se ha transformado, es tiempo que la clase política también lo haga, ya no es posible vivir en un sistema donde las políticas públicas están capturadas por unos cuantos actores políticos. Próxima colaboración: 16 de diciembre de 2020.