La verdad de historieta
“El crimen perfecto no es
aquel que no tiene testigos, sino
el que no deja rastros”.
Los crímenes de la calle Morgue.
La verdad de los hechos criminales ha embelesado a escritores de novelas policiacas. No obstante, a los “políticos” invadiendo espacios en seguridad y en procuración de justicia, les fascina la verdad histórica, la mediática, la partidista y la popular. La verdad de un hecho criminal es una investigación científica de un delito, que se convierte en verdad procesal.
Ahora bien, ¿La sociedad debe conocer la verdad de un hecho criminal?, sí, por más doloroso que este sea, es su derecho, no una prerrogativa.
El problema estriba, en que un político nunca dice la verdad, por eso son políticos, la mentira, es una práctica tradicional en todo el mundo, altamente aceptada en hechos criminales de alto perfil.
Saber la verdad o saber que ocurrió en un delito, tiene sus asegunes. Establecer ciertos hechos y plantarlos en una sociedad como verdad histórica de una sociedad, es simple. Los hechos narrados por el Estado son altamente creíbles cuando no hay contrapesos de investigación externos de lo ocurrido en un tiempo y lugar determinado, sí los hay, cuando menos, siembran la duda popular. Si la gente deja de dudar, no moviliza su pensamiento, o como citaba Jorge Luis Borges: “La duda, es uno de los nombres de la inteligencia”.
Los viejos agentes secretos, militares y policías, persistentemente decretan: -Uy chamaco, sí yo te contara. – Pues sí, la mentira, la ocultación, la tergiversación y el profundo secretismo a la mexicana en materia delictual, nos ha llevado a escenarios sanguinarios incomprensibles, a historias de terror, que han dado lugar a la simpleza mexicana de vociferar: “Imagínate vivir en suiza y perderte de esto”.
Hoy, personas aún creen, dicen y sostienen que México no es violento y que no pasa nada, que son habladurías, pues claro, su fuente de información es estrictamente gubernamental. La ausencia de veracidad ante hechos criminales, son pan nuestro de cada día.
Se dice, que los gobiernos deben tener el monopolio de su “verdad”, hay que mentir en materia criminal, por el bien de la patria. El inconveniente, es que mientras menos información confiable tenga la ciudadanía es más factible de ser victima de un delito.
“Fortalecer los procesos de búsqueda de personas desaparecidas y no localizadas”, si, sin embargo, falta: Alertas de búsqueda inmediata; La desaparición homologarla como secuestro; Cifras con CI mensualmente de desaparecidos; El elefante blanco de la comisión ejecutiva de atención a víctimas; Centro Nacional y plataforma de identificación humana; Base única de información forense y un ID identificación única.
Existe una emergencia rancia en violencia e inseguridad, pero no debe haber enredo entre nuestros enemigos, las gentes peligrosas, la actuación e intervención policial y militar, con las relaciones internacionales y nuestra política interior.
TAPANCO: Platón decía que la mentira es aceptada, si los políticos la emplean con sus súbditos, pero es un crimen si la manipulación procede de los gobernados a sus superiores. Maquiavelo, explicaba también que el ser humano es una criatura débil y malévola, por eso recomendaba la mentira, el fingimiento y las falsas promesas como instrumento político.
¿Usted estimado lector, es un incrédulo?
X @franciscosoni