Bernardina Lara se “murió en la raya”

Una misa en el templo del Divino Maestro, guardias de honor de miles de trabajadores y un concierto de miércoles por la tarde de la Orquesta Sinfónica de San Luis Potosí, marcaron la despedida de cuerpo presente de la secretaría general del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio de Gobierno del Estado (SUTSGE), quien dirigió al sindicato por 33 años y quien falleció en el umbral del 50 aniversario de esa organización de trabajadores.

El sindicato obtuvo la toma de nota del Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje (TECA) los primeros meses de 1976, con Ramón Díaz de León Ríos como secretario general. En la asamblea de 1988 resultó electa secretaria general Elsa Manzano, quien nombró tesorera en su planilla a Bernardina Lara Argüelles.

En la asamblea sindical de 1992, siendo gobernador Gonzalo Martínez Corbalá, dio a Bernardina Lara la dirigencia del sindicato, en la que permaneció hasta este martes. Los trabajadores consideran que la dirigente sindical técnicamente se murió en la raya, porque hasta sus últimos días firmó peticiones y acuerdos y se mantuvo al pendiente de los litigios para el reconocimiento y la toma de nota, una vez que el gobierno del Estado desconoció la existencia del sindicato mayoritario.

Los trabajadores despidieron a Bernardina Lara con guardias de honor a lo largo de la noche de la víspera y todo el miércoles.  Los burócratas ya la esperaban en el templo desde temprana hora. Apenas llegó el cuerpo y la Banda del Estado se presentó para tocar algunas melodías. A las 5 de la tarde de este miércoles, fue organizada una breve ceremonia litúrgica en las instalaciones del sindicato mayoritario.

Su cuerpo fue trasladado a su natal Tempoal, Veracruz, para una misa más de despedida y 

su sepultura.