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Aunque asumió que, para la mujer la cárcel nunca será la solución frente a la interrupción fetal, Jesús Carlos Cabrero Romero, arzobispo de la Arquidiócesis de San Luis Potosí, sostuvo que el aborto “no es un apoyo” para la mujer. Sugirió sustituir la “cultura de la muerte”.
Señaló que es necesario reconocer y atender la dignidad humana, en particular en el caso de las mujeres en condición vulnerable. “Los obispos reconocemos la necesidad de una atención especial para aquellas mujeres que requieren protección”, dijo.
Cabrero Romero reiteró su oposición al aborto, por lo cual, una opción a para evitar esa práctica puede ser la protección, apoyo en necesidades materiales y de salud física y psicológica, pero no la cárcel.
En su colaboración “Hagamos un anuncio atractivo de la cultura de la vida y dignidad humana”, publicado en el semanario parroquial de “La Red”, exhortó a los legisladores, abogados y ciudadanos, levantar “fuertemente” la voz en defensa de la vida.
Planteó una participación constructiva y propositiva de líderes del país, dirigentes de gobierno, líderes sociales, medios de información y responsables de la educación, a fin de sustituir una “cultura de la muerte”.
“Es por eso que, como iglesia, nos comprometemos a favor de la vida y la dignidad humana. Estamos seguros que el amor maternal de María de Guadalupe seguirá acompañando a nuestro país”, señaló.
