No habrá ofrenda en el monumento
En vísperas de la conmemoración del Bicentenario de la Consumación de la Independencia, con 110 años, el Monumento a la Independencia, por primera vez por una causa nueva, no será escenario de la ceremonia conmemorativa de ofrenda floral y homenaje de estudiantes, como celebración de inicio del tradicional desfile con motivo del inicio de la Guerra de Independencia.
El año pasado solo influyó la pandemia, pero en esta ocasión y ante el regreso a las clases presenciales, ni siquiera estarán presentes los niños que leen poemas.
El monumento se encuentra inhabilitado y en proceso de reparación.
El monumento erigido al centro del Jardín de San Juan de Dios, presenta desprendimientos que lo exponen al derrumbe, por contacto con una grieta que afecta por igual al Museo Federico Silva, la iglesia del Espíritu Santo, la Plaza del Carmen y el Museo Nacional de La Máscara.
El monumento fue inaugurado en 1911 y sustituyó a un Obelisco de La Paz, donado en 1907 por los hermanos Viaggi, dueños del taller donde eran elaborados la mayor parte de los monumentos funerarios de mármol del Cementerio Municipal “El Saucito”.
El monumento fue construido en 1911 a partir de los donativos de los niños de educación básica.
Fue diseñado por el profesor Pedro Amézquita y mandado construir con las manos de los escultores Leocadio Chávez y Gabriel Muñoz. Su construcción se basa en piezas de cantera coronada con un capitel corintio que sostiene un mundo, y en su remate, consta de un águila real mexicana que libera las cadenas, en señal de independencia.
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