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Mientras miles de potosinos pueden confinarse en sus hogares y desde ahí realizar su empleo, otros tantos como Efraín González Ávila, quien se dedica a ser un “mil usos”, es decir, recolectar y separar basura, lavar coches, hacer trabajos de plomería o albañilería…o como dice él: “en lo que sea que salga lana”, diariamente sale a trabajar para obtener una ganancia, sin importar si el Covid-19 sigue expandiéndose por la capital potosina.
Residente de la calle Primera en la colonia San Luis, ubicada a unos metros del Centro Histórico capitalino, Efraín González Ávila, ciudadano que hace casi dos décadas sufrió la amputación de una parte de su pierna derecha, parte a diario de su casa, en aras de obtener unas monedas para sobrevivir; ahora más compleja la situación por la contingencia sanitaria.
Hasta este sábado, San Luis Potosí capital contabiliza 59 personas contagiadas, de las cuales tres habitantes han perecido por coronavirus. Con dicha cantidad de confirmaciones, la urbe capitalina concentra el 71.95 por ciento de la totalidad de casos del estado, según datos de la Secretaría de Salud estatal (Ssa).
Sin importar cómo crece el virus SARS-Cov-2 en la ciudad, con una camisa color blanca manchada de lodo e insignias del Gobierno del Estado; zapatos aterrados, unas muletas hechizas con dos extensiones, una de madera y otra de metal; una gorra para el intenso calor y una gran sonrisa, don Efraín estira con una rafia atada a su cintura un carrito improvisado a punto de destartalarse, pero resistente a los baches y los topes, en el cual carga material de construcción, cartón, plástico y demás chacharas.
No tiene un empleo definido en la actualidad, pues desde hace cuatro años, recoge todo lo que puede recolectar y separar basura, lavar coches o realiza trabajos de plomería o albañilería, actividades productivas que en promedio le generan un ingreso de 60 a 100 pesos al día…si bien le va.
Antes de eso, laboraba en la limpieza y lavado de automóviles en un estacionamiento, así como de obrero en una fábrica productora de mecates, pero cerró y quedó desempleado.
