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De los 256 sacerdotes de la iglesia católica local, se le solicitó a 48 retirarse a sus hogares o casas parroquiales debido a su edad, esto, por ser población con factores de riesgo frente al Covid-19, reportó Rubén Pérez Ortiz, ecónomo de la Arquidiócesis de San Luis Potosí.
En entrevista, el presbítero precisó que los clérigos puestos en aislamiento tienen 65 años en adelante, y en algunos casos padecen enfermedades crónicas como diabetes mellitus e hipertensión arterial.
Pérez Ortiz informó que la mayoría de los curas son residentes de la capital potosina, quienes estaban como canónigos en la Catedral Metropolitana u otros templos religiosos.
Reconoció que, por la ausencia de sus colegas, los demás colaboradores tienen el reto de celebrar misas a través de transmisión vía streaming -Facebook, principalmente-.
Enfatizó que hasta el momento es compleja la situación de las confesiones, pero también la atención de fieles con crisis, estrés y ansiedad, derivado del aislamiento en sus hogares por la Jornada Nacional de Sana Distancia.
"A los sacerdotes adultos mayores, se les pidió que estuvieran en la cuarentena, particularmente la atención pastoral centrada en los sacerdotes jóvenes o de mediana edad", expuso.
