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Hasta septiembre pasado, el estado había ligado dos trimestres consecutivos con descenso en sus ingresos, lo que provocó que para el noveno mes del año, la entidad presente un balance inferior en casi dos mil millones de pesos con respecto al indicador del mismo periodo de 2019. El balance financiero de 2021 podría ser deficitario, advirtió la Secretaría de Finanzas sobre esta situación.
El panorama anterior se expone en el documento de la cuenta pública correspondiente al tercer trimestre de este año, entregado por la Secretaría de Finanzas del Ejecutivo al Congreso del Estado el pasado jueves.
En el mismo, señala que por los gastos extraordinarios generados por la pandemia y una baja de 366.7 millones de pesos en los ingresos hasta septiembre pasado, las finanzas estatales podrían cerrar 2020 en números rojos.
“Como resultado de la posición de liquidez al cierre del tercer trimestre 2020, se prevé que se pueda presentar un resultado de balance anual negativo”, advierte el documento en sus notas al estado de actividades.
Hasta septiembre de 2019, el estado tenía un superávit de tres mil 942.1 millones de pesos, producto de haber tenido mayores ingresos que gastos.
En este año, sigue habiendo superávit, pero 50.1% inferior al del año pasado, pues se había reducido a mil 966 millones de pesos.
El documento reconoce “una menor posición de liquidez, derivada de los efectos de la atención a la pandemia por COVID-19”.
Esta situación, agrega, ha obligado a adelantar e incrementar el gasto en el Sector Salud. También reconoce una reducción en los ingresos por la contracción de la actividad económica.
El documento señala que durante el tercer trimestre, la pérdida de ingresos se repitió, pues entre marzo y junio de este año, también hubo una baja en los ingresos de la entidad.
La reducción se puede ubicar en los ingresos estatales, en donde, en todos los rubros, hubo una captación menor a la del
año pasado.
