En esta semana que concluye de nueva cuenta viene a quedar demostrada la falta de capacidad, la falta de voluntad, o de ingredientes reposteriles, de la autoridad estatal. Tres bloqueos en la ciudad, uno de ellos sobre una arteria federal, y ni así se logró que reaccionara. Pareciera más bien que estos fueron concertados con cierta antelación, y que se sabía que ocurriría; hay quienes dicen que el secretario de Gobierno, ya los había negociado. Ande usted a saber si es cierto, pero queda la interrogante, y no es de dudarse.
A qué nivel estará el desinterés, que incluso permitieron que el estacionamiento del edificio de Pensiones fuera tomado por los antorchistas, y se desalojó los automóviles de quienes pagan cajones de estacionamiento.
A propósito de desinterés y de absurdos. Cómo andaremos, que la Sociedad Española de Beneficencia, inició la demolición de una casa antigua, frente a la delegación federal del INAH. La instancia ya colocó sellos de clausura de obra, pero resulta sorprendente que lo hicieran exactamente frente a ellos; o no sé qué tanto, recordemos que algunos inmuebles han sido demolidos, y esta dependencia brilla por su ausencia. Nada más piensen en la antigua fábrica de cerillos, en los alrededores de la Alameda, donde más del 70% de una manzana fue demolido; no creo que si uno se da cuenta, la autoridad no lo haga. ¿Qué hace, aparte de farolear, el arquitecto Machinena?
Pero si de farolones se trata, el que se lleva la nominación mayor es el diputado Pedro Carrizales, ése al que le dicen Mijis, quien ahora sacó una camioneta como de sexoservicio, con su foto y su apodo rotulados en los costados. De verdad que tiene mal gusto el personaje, aunque aquí lo reprobable es la procedencia de los recursos que utiliza para sus numeritos; y ni modo que diga que le sobra, es otro de los legisladores muertos de hambre, que se la pasan mendigando adelantos. Y lo que son las cosas, aquí todos sabemos la clase de sanguijuela que es, pero en redes sociales se la pasa ofreciendo recompensas hasta de $50,000.00 pesos, para quien aportara datos para localizar a una mujer secuestrada. ¿De dónde sacará el dinero?
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El escabroso asesinato de la niña Fátima, en la Ciudad de México, nos presenta muchos puntos que vale la pena reconsiderar si en San Luis Potosí se están llevando de manera adecuada, principalmente debemos preguntarnos –y esta interrogante va dirigida a Joel Ramírez, secretario de Educación– si existen en realidad protocolos que garanticen la seguridad de los niños, antes de su ingreso a las aulas, ya dentro de sus planteles, y luego de la conclusión de clases en sus centros educativos.
No está por demás recordar que en San Luis Potosí, muchos de los abusos sexuales a menores, han sido cometidos dentro de las escuelas, por personal que allí labora, esto es, trabajadores de la Secretaría de Educación. Por otro lado, sería interesante saber, cuáles son las disposiciones determinadas por la Secretaría de Educación, respecto a los menores que no son recogidos a tiempo, o dentro de un límite temporal de tolerancia, luego de haber terminado su horario escolar.
En la mayoría de las escuelas públicas, refiriéndome concretamente a primarias, no existe, al menos que me equivoque, un área de trabajo social, que se pueda hacer cargo de este tipo de incidencias. Creo que sería lo ideal contar con departamentos de este tipo, ya que resulta escalofriante que a semejanza de la Ciudad de México, se turnara a los niños que no son recogidos en el plazo establecido, a una agencia del Ministerio Público.
Como lo señalé en un inicio, luego de ver lo que ocurrió el pasado fin de semana en la Ciudad de México, y la respuesta de la autoridad educativa de aquella ciudad, y de los docentes del centro educativo del que derivó la tragedia, sería conveniente que aquí, el secretario de Educación, ponga sus barbas a remojar.
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El sonado asesinato movió muchas fibras sensibles, por lo pronto, y como una forma de presión y de reclamo a la incapacidad del gobierno federal para atender los feminicidios, se ha convocado a un paro nacional de mujeres el día nueve de marzo. Muchas instituciones públicas han señalado su apoyo total a la medida, entre ellas Gobierno del Estado y la UASLP, pero esto de nada servirá, si se continúa dentro de ellas, con la misma permisividad que hasta ahora. Todos sabemos que la mayor cantidad de acosos a trabajadoras y a estudiantes mujeres, se lleva dentro de ésta última, y sus autoridades guardan un silencio omiso, o bien, fingen atender las denuncias. Ficción literaria.
La misma ficción aplican las diputadas de Acción Nacional, que ahora pretenden hacer en causa común con el feminismo. En realidad no les interesa; lo único que pretenden es sacar raja para la hoguera política; quiero ver a las diputadas panistas votando a favor de la interrupción legal del embarazo.
Esperemos que alguien sensibilice, o al menos explique adecuadamente al diputado federal Xavier Azuara, cómo elaborar cartel de apoyo en contra de los feminicidios; alguien le diseñó uno en el que se condenan, y en la parte inferior, aparece un grupo de alegres bailadores. Digo, un poco de sentido común, o de progenitora.
Gracias por la lectura; disfruten su sábado.