Comunicar con propósito: Datos y ética en la era digital
En un mundo saturado de información, ya no basta con comunicar bien, hay que comunicar con propósito. La comunicación, el corazón de toda organización, es lo más descuidado en el día a día. Se invierte tiempo en definir objetivos y audiencias, pero poco en medir lo que se comparte en redes o plataformas.
Antes de tuitear, grabar o enviar por correo electrónico, pregúntate: ¿sabemos cómo estamos comunicando? ¿Conocemos la imagen que la gente tiene de nuestra marca, institución o proyecto? Solo el análisis lo dirá.
Hoy la analítica de datos es una capacidad esencial para los comunicadores. Herramientas como Google Analytics, ATLAS.ti, Tableau o Meta Insights nos permiten medir con precisión nuestra huella digital: quién la observa, cuánto tiempo, desde dónde y (lo más importante) qué piensan o hacen nuestros contenidos. Esos datos, bien interpretados, no solo miden resultados, sino que informan acciones, ajustan estrategias y transforman la manera en que una organización interactúa con su comunidad.
Pero con la capacidad técnica viene la responsabilidad ética. En la era de los algoritmos, donde todo se viraliza antes de pensarse, vale recordar que detrás de cada clic hay alguien. La comunicación estratégica con sentido social no se construye con cifras, sino con conciencia. Descubrir significa responsabilizarse, no manipular, no desinformar, no cosificar al otro. En el mundo de lo viral se valora más que la verdad, la ética es la luz de los nuevos profesionales de la comunicación.
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En la era digital, comunicar ya no es sólo transmitir información, sino comprender los datos que la sostienen y responder éticamente por su impacto. Las instituciones que aspiran a generar confianza y transformar la sociedad tienen que pasar de la intuición a la evidencia, de la improvisación al análisis, del mensaje automático al mensaje con significado. Y aquí es donde la analítica de datos, el pensamiento computacional y el uso ético de la IA se convierten en herramientas para una comunicación verdaderamente estratégica.
La UNESCO ya alertó de que la alfabetización digital y de datos es una de las competencias clave para la ciudadanía del siglo XXI, sin la cual no se puede participar en la sociedad del conocimiento. Profesionalizar la comunicación implica formar profesionales capaces de combinar creatividad y análisis, estrategia y ética, tecnología y humanidad.
5 pasos para comunicarte con impacto y ética
l Revisa tu huella digital. Revisa tus canales, métricas y audiencias. Las analíticas te revelan cómo te perciben y cómo involucrarte.
l Divide y analiza los datos. ¡Divide tu audiencia en grupos según sus intereses, comportamientos y emociones! El pensamiento computacional te ayuda a reconocer patrones y desarrollar estrategias más precisas.
l Crea contenido ético. Toda comunicación debe ser verdadera, plural, transparente, aunque esté generada por la IA.
l Mide, analiza, ajusta. Prueba lo que funciona, mide y decide con datos, no con intuición.
l Crea una cultura de responsabilidad. Comunicar con impacto necesita equipos que entiendan los datos, respeten la privacidad y sean socialmente responsables.
Al final, la comunicación estratégica de datos no se trata de algoritmos ni de paneles, sino de personas y metas. Desde programas como la Licenciatura en Comunicación y Producción Digital del Tecnológico de Monterrey, justo eso es lo que se busca formar: comunicadores con analítica, creatividad y ética para transformar el mundo.
“Formar comunicadores con cabeza y corazón es hoy más necesario que nunca”. Desde programas como la Licenciatura en Comunicación y Producción Digital del Tecnológico de Monterrey se impulsa precisamente esa visión: Profesionales que entiendan los datos, pero también las historias; que dominen las métricas, pero no olviden los valores humanos. Porque al final, la comunicación no son números, son cambios reales en la comunidad.
jorge.ac@tec.mx
(Profesor Investigador de Tiempo Completo. Escuela de Humanidades y Educación. Tecnológico de Monterrey)









