Va a pasar
Hoy amanecemos con la noticia de la muerte de Miguel Uribe, el senador colombiano que hace un par de meses sufrió un atentado a manos de un menor de 14 años. El perpetrador actuó bajo la autoría intelectual de por lo menos tres adultos, sin que en este momento se tenga una idea clara de los motivos que los llevaron a urdir un plan para acabar con la vida del político. Uribe tenía treinta y nueve años, fue nieto de un ex presidente y su madre, periodista, fue asesinada cuando éste era todavía un niño, a manos de un grupo del crimen organizado.
El joven senador ciertamente tenía la intención de competir por la presidencia de su país, pero no era el favorito. Su tendencia se acercaba más al conservadurismo y tenía posturas fuertes contra el crimen, pero no al punto que pudiesen tener otros competidores, que representan en sí mismos una amenaza contra la delincuencia. Así, un niño de 14 años ejecutó lo que otros quisieron, por motivos que a nadie le quedan claros. ¿Fue una venganza personal? ¿Qué más representaba el político? ¿A quienes les pareció indispensable terminar con la vida de Uribe?
Independientemente de las motivaciones, está el hecho de tener a niños ejecutando crímenes. En México, según un artículo publicado por Alejandro López Contreras, titulado Reclutamiento y Utilización de Niñas, Niños y Adolescentes por grupos delictivos en México, una forma de explotación en la Trata de Personas, muestra, de manera que asusta, lo fácil que resulta enganchar a un menor de edad en actividades delictivas. Ciertamente, la posibilidad de ser captado por un grupo criminal aumenta considerablemente cuando la propia red de apoyo del menor, es decir, miembros de su familia o de su comunidad en general (escuela, amigos) ya están insertos en estos grupos, pero, en realidad, cualquiera puede entrar en contacto y ser reclutado. López señala que hay una labor de convencimiento en donde se hace saber que no se pretende aislar a los menores de sus familias o sus comunidades, sino que se les vende la idea de que es un trabajo como cualquier otro, y que deben seguir con sus actividades ordinarias. Más adelante, la dinámica los lleva ver que se el niño o la niña responde bien a las tareas delictivas -menores en un inicio-pueden pueden comenzar otra etapa en el reclutamiento que los lleva a adiestrarlos para saber cosas básicas en la línea de “trabajo”, como el mantenimiento y uso de armas de fuego, la utilización de radio comunicación o el entrenamiento en la comisión de otros delitos. En nuestro país, según este estudio, esto puede durar entre quince días y tres meses, dependiendo para qué se entrene al menor. Así, hay un entrenamiento digamos técnico, pero que va de la mano con la identificación de ideales del grupo reclutante, es decir, hacerlos sentir parte importante de algo mayor.
De esta manera, se llenan tres vacíos: por un lado, si los cercanos al niño o a la niña ya estaban involucrados, hay una identificación y validez previa que evita cuestionar si lo que se está haciendo está mal o no, ya que reafirman su membresía a un grupo donde ya tenían referentes. Si a esto se suma la necesidad económica y el hecho de poder aportar algo a la familia, se deja de lado cualquier prejuicio y se valida el hecho de estar haciendo algo bueno: ayudar a quienes forman la principal red de apoyo del menor. Finalmente, para aquellos que están solos, en el grupo encuentran una comunidad donde se sienten útiles y valorados.
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Estas tres cuestiones de ningún modo justifican ingresar a las filas de la delincuencia, pero sí explican mucho sobre por qué cada vez vemos a más gente joven enganchada en esas labores.
En el caso del autor material de la muerte de Uribe, podría haber una combinación de factores, misma que se acentúa cuando los marcos legales para la criminalidad en menores dejan huecos que permiten la interpretación laxa, que bien puede ser utilizado entre los delincuentes para convencer a los chicos de realizar el crimen “que al cabo no les va a pasar nada, porque son menores de edad”. Pero les va a pasar. Nos va a pasar a todos.










